Hanna Schygulla, un símbolo de la cultura europea en la Filmoteca

Hanna Schygulla (Alta Silesia, hoy Polonia, 1943) se dio a conocer como musa y actriz fetiche de Rainer Werner Fassbinder (juntos trabajaron en una quincena de películas), pero puede jactarse de haber trabajado con algunos de los más destacados cineastas europeos del último medio siglo: Jean-Luc Godard, Marco Ferreri, Carlos Saura, Margarethe von Trotta, Béla Tarr, Aleksander Sokúrov, Faith Akin... Ello la convierte en algo así como un símbolo de una determinada idea de Europa, y es desde esa perspectiva que la Filmoteca de Catalunya ha querido rendirle homenaje en estos días de zozobra del proyecto europeo.

Un homenaje con un ojo en la pantalla y otro en el escenario, puesto que Schygulla mantiene en paralelo una carrera como actriz y otra como cantante. En la Filmoteca se proyectará entre el miércoles y el 28 de septiembre un ciclo de películas que incluirá hitos de su filmografía como 'Die dritte generation' (1979), 'Lili Marleen' (1981), 'Heller Wahn' (1983), 'Historia de Piera' (1983), 'Un amor en Alemania' (1983), 'Al otro lado' (2007) y 'Fausto' (2010). A modo de introducción a este 'universo Schygulla', la actriz y cantante ofrece en la noche del martes un recital en la sala Chomón de la Filmoteca, acompañada al piano por Jean-Marie Sénia, un músico cuya relación con el cine se inició en los años 70, cuando empezó a colaborar con Jacques Rivette.

CATALUNYA, EN LA "VANGUARDIA SOCIAL"

Schygulla ha relatado que desde que empezó a trabajar con Fassbinder en una compañía de teatro en los años 60, su principal motor y fuente de inspiración ha sido el deseo de preservar la inocencia. "Todo lo que es inocente, es decir, auténtico, me provoca un sentimiento de ternura que necesito para vivir", ha afirmado. Un sentimiento que no debe confundirse con la nostalgia, ha aclarado. La actriz, que se define como "progresista", ha dicho ser "consciente" de que "Catalunya es un territorio que siempre ha dado mucha vanguardaia en el arte y también en ciertos asuntos sociales". "Creo que aquí la gente vive en menos caos destructivo que en la otra parte [de España] donde se habla español", ha señalado.