pulso CON HACHETTE por el futuro del LIBRO

La guerra del 'e-book' a 9,99 dólares

Amazon presiona a las editoriales de EEUU para bajar los precios

Vista general del principal almacén de Amazon en Inglaterra.

Vista general del principal almacén de Amazon en Inglaterra.

ERNEST ALÓS
BARCELONA

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Amazon ha puesto boca arriba sus cartas en la tensa partida que juega con el grupo editorial Hachette en EEUU (y se supone que, pronto, con el resto de la industria editorial del mundo). Ahora será necesario ver hasta qué punto están marcadas. En un comunicado hecho público en su web, la multinacional fundada por Jeff Beszos ha hecho pública su versión de las condiciones que quiere fijar a Hachette, que suponen básicamente reducir el precio más habitual de una novedad en EEUU en formato de e-book a 9,99 dólares (7,45 euros), salvo casos muy especiales, repartiendo el importe de la venta de la siguiente manera: el 35% para el autor, el 35% para el editor y el 30% para Amazon.

Amazon destaca el incremento del porcentaje del autor del 25% al 35%, como parte de la campaña de imagen que ha emprendido para modificar la imagen de abuso dominante que generó al conocerse que había empezado a tomar represalias contra Hachette en medio del contencioso entre ambos. Amazon ha reducido el mínimo las existencias de libros de Hachette, retrasando así las fechas de entrega, y ha eliminado la opción de comprar anticipadamente los libros de este grupo editorial, uno de los cinco grandes.

Según el comunicado de Amazon, «un objetivo clave es bajar los precios de los libros electrónicos», teniendo en cuenta que los libros compiten «contra los juegos móviles, la televisión, las películas, Facebook, los blogs, los sitios de información gratuita y más». Según la compañía, el precio al que se venden muchos títulos, de entre 14,99 y 19,99 dólares (de 11,18 a 14,91 euros), es «injustificadamente alto».

EL TAMAÑO DEL PASTEL / Amazon argumenta que el descenso de precios no supondría menos ingresos para editores y autores, ya que la política de precios bajos llevaría a un incremento de las ventas. Según sus datos, un mismo libro vende 1,74 veces más descargas si su precio es de 9,99 dólares que a 14,99 dólares, lo que supone que el total de ingresos para los autores aumentaría el 16% y el precio para el comprador se reduciría el 33%. «El pastel sería más grande», sostiene, aunque no detalla en cuánto se modificaría la parte de la tarta de los editores.

El pulso entre Hachette y Amazon tiene una importancia crucial; de él depende hasta qué punto el gigante del comercio electrónico está en condiciones de dictar sus términos a las editoriales, que temen que su objetivo final sea acabar con ellas tras alcanzar una posición de monopolio. En el 2010 los cinco grandes pactaron con Apple que ellos fijarían los precios de venta y los precios se elevaron. Amazon se tuvo que avenir pero contratacó fomentando la autoedición y apadrinando una ofensiva judicial en la que ha vencido: ahora, cuando los contratos firmados hace cinco años empiezan a vencer, le llega el momento de volver a establecer las reglas del juego.