IDEAS

¿Para cuándo Gary Larson?

Anagrama publica 'Casi todo Baxter', un hito del humor gráfico surrealista

El particular descubrimiento de América de Gary Larson.

El particular descubrimiento de América de Gary Larson. / periodico

RAMÓN DE ESPAÑA

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 Pensaba largarles un rollo sobre lo bueno que es el humorista gráfico británico Glen Baxter (Leeds, 1944), pero se me adelantó Anna Abella con un estupendo artículo al respecto a raíz de su presencia en Barcelona, invitado por su editor, Jorge Herralde, muy recuperado ya de su accidente callejero de hace unos meses, para presentar su nuevo libro, 'Casi todo Baxter. Nuevas y escogidas ocurrencias'. Me conformaré con decir que Baxter es un autor colosal, pero no muy apreciado en España. Lo comprobó el propio Herralde cuando editó en 1985 su libro 'El rayo inminente', del que se vendieron, según el comentario irónico del editor, la friolera de 42 ejemplares. No creo que venda muchos más del último producto del señor Baxter, pero le honra enormemente publicarlo.

Y ya puestos, aprovecho para pedirle que haga lo propio con otro excéntrico muy notable del humor gráfico, el norteamericano Gary Larson (Tacoma, Washington, 1944), cuya saga 'The far side' -publicada en diversos diarios entre 1980 y 1995- es otra pieza cumbre de ese humor surrealista, delirante y a veces demente que distingue al señor Baxter y que tan mal suele funcionar aquí.

Ese tipo de humor parece una especialidad anglosajona que no goza de gran popularidad en el continente europeo, donde los seguidores que cosecha -entre ellos, yo mismo- es fiel, pero escaso. Más acostumbrados al humor político, los españoles no parecen pillarle el punto a la visión del mundo como un lugar básicamente absurdo que no resiste un análisis serio. La obra de Baxter y Larson es una autodefensa contra un mundo que nos da risa para no tener que llorar. Baxter está obsesionado por los 'cowboys', a los que coloca en todo tipo de situaciones imposibles; Larson, con unos animales que se comportan como humanos, consiguiendo poner al descubierto la inconsistencia y la tendencia a hacer el ridículo que mostramos los bípedos.

Yo diría que la figura del excéntrico -como la del disidente: pensemos en Christopher Hitchens- está mucho más valorada en el mundo angloparlante que en el nuestro, donde al disidente se le hunde y al excéntrico se le considera, simplemente, un majadero.