Cumbres borrascosas Andrea Arnold Los nuevos abismos de pasión

Reciente aún el estreno de la última versión de la novela de Charlotte BrontëJane Eyre,llega ahora una nueva adaptación deCumbres borrascosas, la única obra de su hermana, Emily Brontë. El texto, desaforadamente romántico, ha servido tanto para escrupulosas versiones hollywoodienses (la de 1939 a cargo de William Wyler), relecturas en clave surrealista (losAbismos de pasión de Luis Buñuel) o permutaciones muy libres (Hurlevent de Jacques Rivette).

Ahora, en manos de la británica Andrea Arnold (Fish tank), la historia de amor y odio entre Catherine Earnshaw y su hermano adoptivo Heathcliff adquiere tintes contemporáneos aunque respetando escrupulosamente el texto y la época. El resultado es una versión fiel que trasciende, al mismo tiempo, el contexto original para erigirse en un retrato de la crueldad, violencia e intolerancia de los tiempos actuales.

Arnold convierte al protagonista masculino en un muchacho negro, desgarra aún más la historia de amor obsesivo e imposible, lleva la pasión hasta límites insospechados en los pasajes finales y, sobre todo, rueda una película de época con el estilo libre y salvaje de un documental urgente del presente. La cámara en mano no da respiro alguno a los personajes y los momentos de enfrentamiento físico son filmados con una radicalidad extrema. Estamos pues bien lejos de la adaptación reconfortante y clásica de una historia eterna, la recreación puntillosa de aquello que ya conocemos pero queremos volver a ver. Arnold subvierte los mecanismos del relato romántico-gótico y ofrece una película absolutamente moderna anclada en el clasicismo, lo que no es poco.