2Cellos, heavy metal para Pedralbes

El dúo de violonchelistas viajó de las bandas sonoras a impactantes adaptaciones de AC/DC y Iron Maiden en su debut en Barcelona

Un momento de la actuación de 2Cellos en Pedralbes.

Un momento de la actuación de 2Cellos en Pedralbes. / periodico

JORDI BIANCIOTTO / BARCELONA

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Aunque se hayan puesto un poco melancólicos en su último disco, ‘Score’, dedicado a las bandas sonoras, a los chicos de 2Cellos lo que les pone de verdad es armar, con dos violonchelos, un follón parecido al de una banda de heavy metal. Con elegancia y virtuosismo, como comprobamos este sábado en el Festival de Pedralbes.

Su concierto fue uno de los primeros en agotar las entradas, y se entiende que haya corrido la voz sobre el modo en que sus adaptaciones de canciones muy conocidas conecta con la audiencia. El dúo esloveno-croata representa el acercamiento del formato clásico al gran público, haciéndolo más liviano y, a la vez, rebajándole la mística asociable a la alta cultura. Luka Šulić y Stjepan Hauser llegan a comportarse con sus chelos como ‘guitar heroes’, exhibiendo digitaciones supersónicas, correteando por el escenario y buscando reacciones físicas de la platea. “¡Podéis hacer lo que queráis! ¡Podéis gritar! ¡Podéis bailar!”, pidió Hauser al principio del concierto, tras abrir citando el lirismo de ‘Carros de fuego’, de Vangelis.

SESIÓN DE CINE

Su debut barcelonés (el año pasado se les pudo ver en Porta Ferrada), comenzó en ese territorio de músicas de películas de ayer y hoy, de ‘Braveheart’ a ‘Titanic’ pasando por clásicos como ‘El padrino’, ‘Love story’ y ese siempre grato ‘Moon river’ que Henry Mancini firmó para ‘Desayuno con diamantes’. Les arroparon un teclista y un batería que mesuraba con prudencia sus intervenciones (subió un poco el tono en ‘Rain man’), así como once músicos de cuerda reclutados en Barcelona. Adaptaciones sin misterio, de una limitada trascendencia, fieles a los contornos melódicos originales, que sumieron el recinto en cambiantes estados de ánimo, del melodrama a la épica a través del romanticismo.

La sesión dio un vuelco a partir de ‘Smooth criminal’, de Michael Jackson, la versión que les lanzó a la fama (acumula 25 millones de visualizaciones en YouTube), en la que Šulić y Hauser escenificaron un nervioso duelo de cellos. Preludio de la escalada rockera de ‘Thunderstruck’, de AC/DC, con la adaptación de la famosa introducción metálica de Angus Young con vistas a las fugas de Bach. De los rituales del hard rock tomaron incluso el solo de batería, no muy largo, por suerte, camino de ‘Smells like teen spirit’, de Nirvana.

AC/DC es su talismán: al grupo australiano volvieron con ‘Highway to hell’ y ‘Back is black’, que junto a ‘The trooper’, de Iron Maiden, ya en el bis, quizá sea lo más cercano al heavy metal que puedan acoger los jardines de Pedralbes. Chelos con sonido distorsionado, explosiones en la pantalla de vídeo y el público en pie. Dio la impresión de que ahí está la esencia del dúo, aunque luego rebajaran los ánimos con un melodioso ‘With or without you’ (U2) que volvió a mostrarles como esos chicos sensibles que adaptan bonitas canciones al violonchelo.