La crisis asfixia al mundo cultural

El pasado 29 de septiembre, Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, anunciaba, «en aras a la situación económica», la suspensión de la Mostra de Cine de València. De esta manera, el consistorio se ahorraba 1,7 millones de euros para «dedicar a otras cosas necesarias». Al día siguiente, Eduardo Dolón, concejal de Torrevieja, asumía que el premio de novela que lleva el nombre de la ciudad, el mejor dotado de España tras el Planeta, dejaba de convocarse «hasta que la crisis nos permita volver a retomarlo». Y días después saltaban las alarmas en Asturias. La Semana Negra de Gijón y el Centro Niemeyer de Avilés estaban en peligro por falta de subvención. Son algunas de las víctimas más notables de los recortes culturales aplicados por ayuntamientos en bancarrota, autonomías con presupuestos severos y un Ministerio de Cultura que puede tener los días contados (el PP aboga por eliminarlo); pero no son las únicas, la lista es larga y amenaza con aumentar.

CENTROS CULTURALES La Ciudad de la Cultura de Santiago, paralizada

Además del centro cultural asturiano, que seis meses después de su inauguración, ha anulado la programación hasta mediados del 2012, el norte de España ha perdido otra gran infraestructura. Aunque quizá sería más correcto decir que no ha ganado, puesto que no ha llegado a inaugurarse en su totalidad. Es la Ciudad de la Cultura de Santiago de Compostela, un megaproyecto diseñado por Peter Eisenman que, tras 10 años de obras, 400 millones de euros, dos edificios en marcha, dos a medio levantar y otro por empezar, el consejero de Cultura de la Xunta, Roberto Varela, anunció la semana pasada que deja «de lado», ya que no es «prioritario» y es imprescindible «gestionar bien los pocos recursos disponibles».

Sí sigue siendo prioritario en Sant Feliu de Guíxols el museo Thyssen, pero «la crisis alarga los plazos», afirma Pere Albó, regidor del municipio. Ya que, pese a que la Generalitat y el Ministerio de Cultura «apuestan por el proyecto», la financiación (15 millones de euros) se está revisando.

TEATRO El déficit hace peligrar el Festival de Mérida

Mucho menos presupuesto, 127.000 euros, pero mismo final, la suspensión temporal, vive el estival Shakespeare de Mataró. El pasado verano, 10 días antes de empezar y con la programación cerrada, el Ayuntamiento suspendió el certamen por «razones económicas». No parece una cancelación definitiva, la idea es salvar la cita, pero de momento, en el 2012 seguirá sin convocarse.

Tampoco se libra del desastre el decano de los festivales de teatro que se celebran en España, el de Mérida, tras 78 años en activo anda en la cuerda floja. Los 773.000 euros de pérdidas de la última edición, han llevado al Gobierno extremeño a afirmar que se «encuentra en la uci». Aunque confía en enderezar la situación «reinventando» el certamen y haciéndolo «sostenible». Y en cambios también debe pensar el Temporada Alta de Girona, si quiere sobrevivir. La cita ya ha agotado la ayuda europea Interreg, que suponía más del 20% del presupuesto (2.631.540 euros).

CINE Valencia, Córdoba y Ronda pierden sus citas

Y en un país donde se celebran más de 200 muestras sobre séptimo arte, el desastre se ha cebado especialmente en las citas de cine. Además de la Mostra de València, también se han suspendido el Certamen de Cine Político de Ronda -programado y con la presencia de Oliver Stone anunciada- y el Festival de Cine de Animación de Córdoba. Más suerte han tenido el Festival Cine Europeo de Sevilla que, con un 41% menos de financiación municipal ha optado por reducir los días de certamen y los premios; y el festival Punto de Vista de Pamplona sobre cine documental que, tras semanas de incertidumbre, el Ayuntamiento lo ha convertido en bienal.

También están en entredicho los estudios de la Ciudad de la Luz de Alicante, donde han rodado desde J. A. Bayona hasta Enrique Urbizu. Según explica un importante productor español, cualquier día los estudios «explotan» por la sangría económica que suponen para las arcas públicas.

LETRAS Menos cómic y menos premios literarios

En el mundo de las letras, la crisis se ha llevado por delante el Premio de Novela de Torrevieja, dotado con 360.000 euros, y el Hay Festival (Granada), la importante cita literaria que se celebra también en Segovia y que el año pasado ya no llegó a la Alhambra al no alcanzar el presupuesto. Y está por ver que pasa con el Salón del Cómic de Zaragoza después de que el Ayuntamiento de la ciudad le haya retirado la financiación.