Circo romano en el Sant Jordi

Las espectaculares carreras de cuádrigas de Ben-Hur y las dramáticas luchas de Gladiator, en directo pero sin sangre. Con estos y otros impactantes elementos -acrobacias a caballo, acciones con fuego, bailes...- juega Coliseum. Els jocs de Roma, la ambiciosa propuesta de la compañía Drakònia que se estrena este sábado (20.00 horas), en un Palau Sant Jordi reconvertido en coliseo romano, con la pista cubierta de arena, esclavos y legionarios. Un espectáculo a lo grande en el que participan 90 actores-especialistas y 18 caballos. Hasta leones habrían aparecido si las leyes se lo hubieran permitido, asegura el director artístico, Cesc Martinell.

«Es una propuesta muy visual y familiar, con una estética muy peliculera. A los niños les encanta», remarca el creador, que lleva más de una década al frente, junto con Mireia Blasco, de Drakònia, compañía gerundense centrada en espectáculos temáticos de acción. «Somos actores formados en lucha escénica y hemos ido creciendo con shows de ambientación histórica, como el mundo medieval y el romano. En julio presentamos en Empúries un montaje con cuádrigas y gladiadores que tuvo mucho éxito», explica el director de la serie online Crónicas Drakonianas. Aún mayor es el reto del Sant Jordi, en el que han estado trabajando desde hace un año junto con Carruatges Pujades, empresa experta en las acciones con carros.

«Hace 40 años que en Barcelona no se ven carreras de cuádrigas», informa Martinell, que admite haberse inspirado en películas y en las obras de Santiago Posteguillo para la trama de Coliseum, que el público podrá seguir con mayor proximidad en una pantalla gigante.

Relata las andanzas titánicas de Marcus Octavius Ulpius, un antiguo general romano que al desobedecer las órdenes del tirano Domicià, hermano del emperador Titus, es condenado a luchar como esclavo en el circo. Cual Russell Crow en Gladiator, salta con su espada a la arena. A vencer o morir. Entre tanto músculo y testosterona, se cuela también un paréntesis romántico: su historia de amor con la princesa Cleópatra.

Roger Salvany, artista todoterreno y especialista en secuencias de acción, encarna al héroe. «Lo más complejo pero también agradecido es el trabajo con los animales. Hemos ensayado mucho las carreras de cuádrigas y bigas. Yo llevo 20 años trabajando con caballos», cuenta Salvany, que ha actuado de especialista en filmes como El perfume y Biutiful, y es asimismo bailarín y acróbata de la compañía de El Molino. La banda sonora de Marc Timón (interpretada por la Orquestra Filarmònica de Bulgaria, con Priscilla Hernández como solista) completa el espectacular viaje a la Roma imperial en el Sant Jordi.