Cinco hitos del cine 'low cost'

‘DISPONGO DE BARCOS’

(Juan Cavestany, 2010). “Con esta película empieza todo. Están en ella la intención, los temas y los rasgos de estilo de las películas ‘low cost’ que más nos gustan. La preparación de un robo es el arranque de una cumbre del humor trágico que habla desde el absurdo y el delirio de una España en crisis (en su sentido más amplio)”.

‘DIAMOND FLASH’

(Carlos Vermut, 2011). “Cinco mujeres, con sus miserias y angustias, intransferibles y propias, pero con algo en común: Diamond Flash, un personaje que sobrevuela sus vidas y la película. Con una puesta en escena sobria y un guión fresquísimo y audaz que combina el terror psicológico con códigos de ‘anime’, la película se convirtió en el primer clásico de este anticanon. La consagración de esta película turbia y divertida a partes iguales llegó con la Concha de Oro y la Concha de Plata en el Festival de Cine de San Sebastián. La reina Letizia es muy fan y no es la única”.

Cine en serio con presupuestos de risa

‘MI LOCO ERASMUS’

(Carlo Padial, 2013). “Lo que empieza como un retrato de la comunidad Erasmus en Barcelona (y, por tanto, de la gentrificación y hábitos de esa raza, que funciona como caricatura de la juventud en general) muta hacia el retrato íntimo de un artista (Dídac Alcaraz) que pierde el contacto con la realidad en su intento de filmar la película. Un falso falso documental, porque mediante las técnicas del ‘mockumentary’ logra una honestidad cercana y real. Y también una demostración de la mirada de Padial, esa especie de antropólogo chalado que desfamiliariza lo mundano para exponer lo absurdo, que sabe helar la risa y detectar el humor en nuestras taras”.

‘LA TUMBA DE BRUCE LEE’

(Canódromo Abandonado, 2013). “Una película que rompe de una forma fascinante las fronteras entre la fantasía onírica, la comedia, el drama existencial y el terror. Los componentes del brillante colectivo Canódromo Abandonado parten de ese híbrido inclasificable para hablar de la frustración de una pareja de treintañeros de hoy día. Está llena, además, de imágenes fascinantes”.

‘SEARCHING FOR MERITXELL’

(Burnin’ Percebes, 2014). “El tridente metafísico adolescente de sexo, drogas y rocanrol ha quedado desfasado. Esto va de sexo, canibalismo e internet. La ópera prima del jovencísimo colectivo Burnin' Percebes es una orgía de diálogos trotones y humor subversivo con un lenguaje que bebe tanto de la comedia incómoda como de los vídeos cortos de internet con un resultado rabiosamente moderno en el mejor de los sentidos”.