Cierra Grooveshark, la alternativa a Spotify

Grooveshark, el servicio musical de 'streaming' que competía con Spotify, echó ayer el cierre tras casi diez años de actividad y tras llegar a un acuerdo con la industria musical en los juzgados de Estados Unidos. Así lo anunció el jueves la propia compañía en un comunicado en su página web. 

La decisión llega después de que un juez declarara, hace una semana, que la empresa podría deber hasta 736 millones de dólares en daños y perjuicios por violar los derechos de autor. Tras esta declaración, la empresa llegó a un acuerdo con Sony Music, Warner Music y Universal Music: cerrar su web, sus aplicaciones, borrar sus servidores y eliminar la cuenta de Twitter y Facebook. Además, la plataforma ha pedido perdón a la industria y, en su carta pública de disculpa, promueve alternativas como Spotify (hasta ahora, su principal competidor).

A cambio de desaparecer totalmente de la red, Grooveshark no tendrá que compensar económicamente a las discográficas, que han ganado esta batalla.