La Casa de la Ópera se ilumina con ritmos brasileños en el Festival Vivid

Rocío Otoya

La Casa de la Ópera de Sídney se convirtió en una gigantesca instalación luminosa dedicada a la vida marina que se mueve al ritmo de la música electrónica del DJ brasileño Amon Tobin, al iniciarse hoy el Festival Vivid Sydney.

Este festival, hasta el 17 de junio próximo, incluye 90 instalaciones y proyecciones de 180 artistas locales e internacionales diseminados en el centro y los alrededores de Sídney, así como 400 conciertos y 260 debates de ideas.

La Policía del estado de Nueva Gales del Sur, cuya capital es Sídney, prometió reforzar más la seguridad tanto por tierra, aire y mar tras el atentado del lunes pasado en Manchester, al norte de Inglaterra, que mató a 22 personas, entre ellos menores, y dejó decenas de heridos.

Al inicio del festival ya se sentía el interés de la gente que acudía en masa a ver las instalaciones luminosas de este festival, especialmente alrededor de la bahía, donde pululan los puestos de comida rápida y los restaurantes ofrecen sus mejores vistas, según constató Efe.

Pero, como en todas las ediciones de Vivid, uno de los atractivos más importantes es la instalación de la emblemática Casa de la Ópera, que este año se titula "Audio Creatures" (Criaturas Sonoras), del artista australiano Ash Bolland y animado por Spinifex P/L Sydney.

En el tejado con forma de "velas" de la Casa de la Ópera se proyectan imágenes que evocan a las criaturas marinas pulsantes, aves de coloridos plumajes y plantas tornasoladas, tal y como las concibe Bolland, pionero en los diseños tridimensionales y quien trabajó para Nintendo.

Sus diseños van acompañados de la música electrónica del legendario Amon Tobin, estrella del sello discográfico Ninja Tune y cuya música ha sido utilizada en filmes como "The Italian Job" (2003) o "Intervención divina" (2002), Premio del Jurado en el Festival de Cannes.

"Intentamos hacer que la Casa de la Ópera se convierta en una criatura gigante. Durante 15 minutos se verán proyecciones que cambian en 15 o 16 animales distintos. Todos imaginarios y muy coloridos", comentó Bolland en un comunicado de "Vivid Festival".

Otra de las grandes atracciones es "Trapdoor" (Escotillón), que recrea una ilusión óptica sobre una caverna subterránea que se abre en el suelo y proyecta imágenes que cuentan la historia de la reserva de Barangaroo, parte del territorio del pueblo aborigen Gadigal.

"Magos de la niebla", dirigido por Ignatius Jones y Peewee Ferris, es otra de las proyecciones en el turístico complejo de Darling Harbour en la que los visitantes se ven rodeados de niebla al compás de los rayos y truenos y ante la aparición de figuras místicas gigantescas.

En esta instalación se utilizan doce bombas que arrojan 28 toneladas de agua por minuto y proyecciones en paredes de 60 por 40 metros, así como tecnología láser, fuentes de agua, chorros de llamas, música, fuegos artificiales y otros elementos controlados por un artista informático.

También está "El bosque eléctrico" en el Jardín Botánico, que consiste en la ilusión luminosa de un entramado vegetal que cambia al ritmo de la música y que trae a la vida a distintos animales o "Luces para la vida salvaje" en el zoo de Sídney, que incluye una escultura del vulnerable tiburón Port Jackson.

En la sección Ideas de Vivid se destaca el debate con el director estadounidense Oliver Stone, conocido por sus filmes "Expreso de medianoche", "The Doors", "Pelotón", "Wall Street", "JFK" o "Nixon", entre otros.

También en la sección Ideas brillan el astrónomo Ángel López-Sánchez, quien participa con varios de sus colegas en el debate "La historia de la luz: escudriñando el cosmos", mientras que la muestra "Causa y efecto" aborda problemas como la guerra, la destrucción ambiental y el racismo.

El Festival Vivid, que el año pasado contó con 2,3 millones de visitantes e inyectó unos 82 millones de dólares (73 millones de euros) a la economía local, se expande cada año con su oferta de atractivos que apuntan a captar la atención de turistas de mercados como el de China.