ESTRENO EN EL CICLO BANDAUTORS

De cantante a cantautora

Gemma Humet muestra su aromático debut, 'Si canto enrere', hoy en el Petit Palau

Gemma Humet.

Gemma Humet.

JORDI BIANCIOTTO / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Esta semana ha salido su primer disco, Si canto enrere, pero Gemma Humet no es una desconocida, puesto que se la ha visto en los escenarios junto a los veteranos Toti Soler y Toni Xuclà, y al joven Pau Figueres. Con este último ha confeccionado este trabajo, que recoge, sobre todo, canciones propias, y que este viernes estrena en el Petit Palau, dentro del ciclo BandAutors (21.00 horas). «Un disco que suena como soy yo. Si no, sería incapaz de defenderlo», subraya Humet.

Si canto enrere refleja, en su título, su diseño gráfico (donde aparece junto a una niña, Ariadna, hija de unos primos) y algunas de sus canciones, una lánguida nostalgia infantil. «Supongo que cuando alguien hace un traslado le salen cosas: escritos, cartas... Este es mi pasado. El disco refleja un momento de cambio», explica la cantante, pianista y compositora de Terrassa, de 26 años, sobrina del desaparecido Joan Baptista Humet.

Homenaje a Joan Baptista

De su tío interpreta una pieza, Si te me'n vas, en un formato más desnudo. Y eso que tenía reparos a adaptar canciones suyas. «Me molesta que la gente pueda decir que me aprovecho. Pero no quería dejar de cantarla por el hecho de que fuera de mi tío», señala. Hasta hace poco no se había atrevido a componer. «Todo el mundo me decía que hiciera un disco. Y hace año y medio me lo planteé. Sin ponerme presión. Y ví que podía unir la interpretación y la composición», recuerda. Y entró en materia esbozando unas canciones que expresan reflexiones y sentimientos. «Llegué a la conclusión de que para ser sincera con la gente tenía que hablar de mí. Lo que me ha pasado a mí podría haberle pasado a cualquiera, porque a todos nos acaban pasando las mismas cosas», explica Humet, que admira tanto a Dulce Pontes, Elis Regina, Estrella Morente o Maria del Mar Bonet como a Beyoncé. «Rihanna no tanto», precisa.

Su actitud en escena es «cero diva»: opta por buscar cobijo en una silla, «como en el flamenco», protegida por el escenario y los músicos. «Prefiero cantar sentada. De pie me siento expuesta. Creo que es una cuestión de vergüenza», confiesa. ¿No cree que esa actitud puede perjudicar su proyección? «No me puedo imponer algo en lo que no me siento cómoda solo para gustar más», reflexiona Humet, a quien hemos podido ver en marcos solemnes: el 11-S del 2013 en la Ciutadella, el homenaje a Martí i Pol del teatro Victoria o la concesión del Premi d'Honor de les Lletres Catalanes a Raimon, en el Palau. «Situaciones muy serias, sí, pero en estos momentos me gusta participar en este tipo de cosas. Si no lo hacemos nosotros, ¿quién lo hará?», se pregunta. Sea cual sea el contexto, tiene clara su prioridad: «Lo que que quiero es cantar».