UN ÁLBUM CON PINCELADAS DE JAZZ, RITMOS CUBANOS Y GUIÑOS ELECTRÓNICOS

Bruno Oro, más músico que 'showman'

Música Directa: Acústico de Bruno Oro

periodico

NÚRIA MARTORELL / Barcelona

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La verdadera vocación de Bruno Oro es tocar el piano. Cantar. Componer. De hecho, va por el tercer disco. "Mi imagen tan mediatizada y asociada a la comedia, a productos como 'Polònia' y 'Crackòvia', hace que difícilmente la gente me tome en serio en la música. Es una lucha complicada --explica el 'showman'--Pero espero que este álbum, con un registro claramente alejado a lo que hago, ayude a que mi clientela no sea tan reducida y venga a verme". Mañana mismo lo comprobará: presenta 'Viatge de l'home que esturnuda' en la Biblioteca Nacional de Catalunya.

Bruno Oro se supo músico antes que actor. "Toco el piano desde los 10 años, he escuchado mucha más música que he visto obras de teatro. Pero con esto de la fama, la gente me dice 'tú lo has de tener más fácil, ¿no?' Pues no --se lamenta--. Hace que la gente me vea como un oportunista. Que crea que a ese que en la tele hace de Artur Mas y de Cristiano Ronaldo le da por cantar. No lo ve coherente. La intolerancia es algo muy latino". Paleta estilística

El compacto empieza con una 'intro' dando la bienvenida en los cuatro idiomas que domina y aborda en sus canciones: catalán, castellano, italiano e inglés. Desprende descaro, desparpajo y un buscado sonido muy fresco, fruto de tocar todos los músicos a la vez. Y cuenta con una curiosa paleta estilística, con tonos jazzísticos (en piezas como 'Jazz y Harpo'); ritmos cubanos ('Un piano se muere en La Habana' y la divertida 'Si la vida te da la espalda tócale el culo'), e incluso se atreve con guiños electrónicos ('Viva l'amore' y 'Music will survive').

Madurez musical

"Yo destacaría, sobre todo, más madurez a nivel musical. He trabajado mucho, tanto la técnica de piano como la composición, a nivel de armonía. Y canciones que antes daría por buenas ahora las descarto", asegura un Bruno Oro que firma la producción junto al contrabajista Manuel Krapovickas, integrante y director musical de su resolutiva e inspirada banda.

Un grupo que no ha tenido pudor en grabar el videoclip de 'Cuando la vida te da la espalda tócale el culo' entre chicas vestidas (bueno, desvestidas) con lencería. El clip trae cola, porque se remata con un culo al aire. "Buscaba un punto erótico, pero elegante, no basto, ¿eh? Y la imagen de este culo al final... es tan bonito que se justifica por sí solo". Para la puesta de largo del disco, cuenta con el guion de Ramon Simó (que ya firmó el montaje de '4 acords'). "A este espacio que tanto impresiona --dice refiriéndose a la Biblioteca Nacional de Catalunya-- le quiere dar un ambiente acorde a este punto de jazz decadente del disco, con toques de modernidad. La bóveda se iluminará de rojo, nosotros con colores fríos... Y estoy tomando clases de claqué porque me marcaré algunos pasos. El ritmo está muy presente en todo el espectáculo. Y participará la bailarina contemporánea Laura Vilar, en un dúo improvisado y un solo".

Homenaje a su hermano

El Bruno Oro 'showman' dejará paso al Bruno Oro "que canta canciones, narra alguna historia" e interactúa con unos músicos "muy payasos", avisa. Entre las piezas que estrenará en directo, destaca 'Wise man', la que interpreta en acústico en EL PERIÓDICO, acompañado por el saxofón de Marcel·lí Bayer.

Una pieza dedicada a su hermano, "un hombre sabio" (como reza el título) de 22 años. "Un superdotado, un fuera de serie que es biólogo y estudia las células madre para combatir el alzhéimer. A causa de una extraña bacteria tuvo ataques de vértigo, le vieron una mancha en el cerebro, luego entró en estado de coma, cogió una infección y estuvo debatiéndose entre la vida y la muerte". La letra se la compuso mientras le acompañaba en el hospital. "Entonces, no le dije nada. Pero estando juntos de viaje en África, ¡pasaron cosas que yo había escrito en esta canción!". Cuando la escuchó por fin, con toda la familia, "fue una catarsis de lágrima viva".