Carla da el salto con su elegante synth-pop

'Night thoughts' (Sones, 2016) es el brillante debut de Carla, que, a diferencia de su hermana Joana Serrat, prefiere obviar el apelido en su nombre artístico. Antes de presentar las nuevas canciones este martes en la Sala Apolo (20 horas), en el marco del Primavera Sound, pasó por EL PERIÓDICO y dejó un aperitivo en formato acústico para Música Directa.

Su disco, compuesto por elegantes canciones de synth-pop que ha gestado con su hermano, el batería Toni Serrat, sumerge al oyente en un mundo de sonidos electrónicos y cuidadas atmósferas donde destaca su sugerente voz, siempre en inglés. Sus principales referentes son cantantes de los 90 como Sade, Portishead, Everything but the Girl pero también artistas actuales como Chromatics, James Blake y Little Dragon. "Son grupos y solistas que utilizan muchos teclados, sintetizadores y en los que la voz tiene un punto soul, un género que me atrae", reconoce esta joven de Vic que a sus 25 años demuestra tener una sólida base e ideas claras. Además de su vertiente musical cultiva otra faceta creativa como pintora e ilustradora. "Mi objetivo es poder compaginar ambas", señala.

En el estudio de EL PERIÓDICO grabó 'Lucky one'. "En ella hablo de esas envidias que uno detecta cuando se sabe afortunado por algo". Quizá por eso esta canción es más oscura tanto en la letra como en la intención a la hora de cantarla ("tu presumes de ser afortunado, pero la que tiene suerte soy yo", advierte). Con esta pieza captó la atención de John Davis -prodictor que ha trabajado con Blur, FKA twigs y Lana del Rey- quien aceptó encantado encargarse de la masterización del disco en Londres. Las canciones se grabaron en el estudio de Edu Martínez, coproductor del álbum con Carla.

INSPIRACIÓN NOCTURNA

La mayoría de las canciones están relacionadas con la noche. 'Night thoughts', el título del disco, lo es también del último tema. "Hace referencia a ese punto de la noche donde lo ves todo claro, aunque también es un momento algo triste porque te sientes sola. En esa canción hablo de un amor no correspondido, de cuando ves un final muy claro y la otra persona aún no se da cuenta de que la historia se ha acabado".

Para Carla lo importante es la melodía. "Nunca comienzo por la letra. Lo primero que busco son los sonidos. A partir de aquí me siento cómoda para hablar de algo. El proceso de creación de la letra es muy intuitivo. Escribo aquello que me viene a la cabeza, aquello que siento o necesito expresar en ese momento".

No le gusta extenderse demasiado en sus escritos, es más bien minimalista en este aspecto. Ella estudió piano clásico. "Amaba el piano pero lo llegué a aburrir. Tanto nivel de exigencia me cansó. Lo abandoné durante tres años y después, poco a poco, volví. Pero lo hice en secreto, solo lo tocaba cuando no había nadie en casa", recuerda.

A partir de entonces, Carla siguió su camino en la música de forma autodidacta, libre, sin presiones. "Me costó volver a coger confianza y enseñar mi trabajo. Las primeras canciones eran muy introspectivas". Después se atrevió a compartir su trabajo en MySpace y se fue animando. "Mis hermanos también han influido", añade. "Al haber hecho conciertos acompañando a Joana, dar el salto y lanzarme en solitario no ha sido tan difícil".