Los rivales de Mercedes se encomiendan a la lluvia en Canadá

Dicen que la llegada de la cerveza holandesa Heinneken a la F-1 como uno de los patrocinadores principales y su acuerdo para compartir distribución con Red Bull —un contrato millonario— está detrás de la subida de Max Verstappen desde Toro Rosso a Red Bull. De hecho, el equipo de las bebidas energéticas hizo debutar al jovencísimo holandés en Barcelona para no hacer coincidir el ascenso al primer equipo con el anuncio acuerdo de patrocinio oficializado en Montreal, donde este fin de semana se celebra el GP de Canadá. Max justificó igualmente la decisión de Red Bull con una victoria en el GP de España que fulminó todos los récords de juventud. Tras su nefasto GP de Mónaco —se estrelló en los libres, la clasificación y la carrera— marcó en Montreal el cuarto mejor tiempo de la jornada, por detrás de los Mercedes y el Ferrari de Sebastian Vettel.

LA PREOCUPACIÓN DE FERRARI

“Si después de ser más rápidos que nosotros en Barcelona y Mónaco, si Red Bull vuelve a ser más rápido aquí en Montreal, podemos decir que lo serán probablemente el resto del año, porque se trata de tres circuitos completamente diferentes”, reflexiona Marc Gené desde Ferrari. En efecto, el equipo de Maranello no solo no es rival para Mercedes, sino que Red Bull está a punto de arrebatarle el puesto como segundo equipo de la parrilla. Después de consolarse haciendo podios en todas las carreras disputadas esta temporada, en Mónaco ni siquiera llegaron al cajón. ¿Crisis? No para los que piensan que Ferrari siempre ha estado ahí, como segundón, en los últimos seis o siete años. “Bueno, es por estas cosas por lo que me fui de Ferrari. Está donde ha estado en estos últimos años, por eso aposté por McLaren, porque creo que a medio plazo es la única alternativa para batir a los Mercedes”, asegura Fernando Alonso.

NUEVO MOTOR PARA ALONSO

El bicampeón del mundo asturiano consiguió el 11º mejor tiempo de la jornada con un nuevo motor, que ha sufrido algunas mejoras, pero más en el plano de la fiabilidad que del rendimiento. Carlos Sainz finalizó un puesto por delante “en el circuito de todo el mundial que peor va a nuestro coche. Hay largas rectas, no ha curvas de alta velocidad, solo de baja velocidad que necesita tracción... en fin, todo lo que no nos va bien, pero incluso así el año pasado conseguí puntuar y ese es de nuevo el objetivo”.

Por lo visto en las dos primeras sesiones de entrenamientos libres, la estrategia se decidirá a una parada, aunque el pronóstico anuncia lluvia para el domingo de carrera, y eso animará aún más una carrera que históricamente ha deparado carreras trepidantes.