"¡Doctor, doctor, salte a la pista que acaban de tirar a Fonsi!"

No le importó que, en el minuto de silencio vivido en la parrilla de Alcañiz, a las 10.35 horas, se oyese un «¡Viva la República!» Juan Carlos I ni pestañeó. Acababa de llegar en helicóptero a Motorland, acompañado del doctor Ángel Villamor, viejo conocido y, además, el médico que curó a Fonsi Nieto del desastre que le hicieron, en su tobillo izquierdo, en una clínica de Indianápolis. «Tú te vienes conmigo a Alcañiz», le dijo hace unos días el Rey a Villamor. No solo eso. Villamor se llevó al Rey a la primera curva del circuito aragonés y allí, delante de sus ojos, varios pilotos entraron tan impetuosamente en esa curva que acabaron tirando a Fonsi Nieto, a quien Juan Carlos I había recibido minutos antes para interesarse por su estado.

Villamor, tras el muro, junto al Rey y parte de su séquito, flipó cuando el monarca le gritó: «¡Doctor, doctor, salte a la pista que acaban de tirar a Fonsi!». Villamor saltó el muro instintivamente, pero enseguida se dio cuenta de que Fonsi se levantaba por su propio pie y caminaba, cojeando, en compañía de varios comisarios. «No se ha hecho nada, menos mal», exclamó Juan Carlos I.

«Ha estado divino, no puedo decir más, ¡divino! Lo sabía todo, todo, de mi lesión, mi sufrimiento, mis operaciones, todo, todo», contaba después, poco antes de iniciarse la carrera de MotoGP, el propio Fonsi Nieto, que estuvo acompañado por su primo Pablete en su visita al Rey. «Yo, cada vez que lo he visto, me lo he pasado en grande con él. Nos quiere mucho a todos».