MUNDIAL DE MOTOCICLISMO
Rabat y Márquez, hace ahora seis años
Ambos pilotos, que comparten título de Moto2, coincidieron en el 2008 en el Mundial de 125cc de la mano de Alberto Puig
Fíjense bien en la foto. Cierto, las hay a porrillo. Son los inicios de dos deportistas que acabarían siendo campeones. Grandes campeones. Y, en este caso, encima, grandes amigos. La foto data del 2008. Ahí los tienen, son, nada más y nada menos, que Esteve 'Tito' Rabat, flamante nuevo campeón del mundo de Moto2, y Marc Márquez, el mejor piloto del mundo en estos momentos, tetracampeón del mundo y bicampeón de MotoGP más joven de la historia.
La foto es, realmente, portentosa. Se trata del equipo Repsol de 125cc del 2008, dirigido por Alberto Puig. Era el año del debut de Márquez y la cuarta temporada de Rabat en el Mundial de velocidad, así que es de suponer que el hijo del relojero ejercía de lazarillo del pequeño Marc. Ese año, con muchos problemas físicos de Márquez en su inicio por lesión, el prodigio de Cervera acabó 13º en el campeonato, y Rabat, 14º.
El primer récord de Marc
Pero ya en esa primeriza temporada, Márquez consiguió su primera gran, enorme, gesta, prodigiosa gesta cuando logró el primer podio de su vida en el Gran Premio de Inglaterra, disputado en Donington Park. Fue, además, el podio más joven de la historia con el británico Scott Redding (primero), el francés Mike Di Meglio (segundo) y Márquez (tercero).
La tercera posición que alcanzó Márquez (15 y 126 días) lo situó como el segundo piloto más joven en lograr un podio, por detrás del venezolano Iván Palazzese, que lo consiguió a la edad de 15 años y 77 días. Márquez se convirtió, además, en el español más joven que subía al 'cajón', tras birlarle el récord a Dani Pedrosa, que también fue tercero en Valencia 2001, cuando tenía 15 años y 359 días.
Cuando era pequeñito
Aunque las dos hazañas parecen igual de sorprendentes, es probable que la de Márquez sea más significativa por las circunstancias en las que se ha visto el joven en la que es su primera temporada en el Mundial. Entonces, el motorista de Cervera (Lérida) era considerado un tirillas (medía 1,50 metros y pesaba 46 kilos), con los pros y los contras que eso conlleva en este deporte. "Marc tenía que llevar un lastre de 10 kilos en la moto porque no llegaba al mínimo peso permitido por la organización [136 kilos entre moto y piloto]", recuerda Emilio Alzamora, excampeón del mundo de 125cc y mánager de Márquez.
Han pasado, pues, seis años y la coronación de Rabat como nuevo campeón del mundo de Moto2, contando siempre con el apoyo, la ayuda, el asesoramiento, pese a que Tito es cuatro años mayor que Marc (25 frente a 21), del ídolo de Cervera (Lleida), hace que la imagen nos permita recordar aquellos tiempos en los que, nada más pisar el Mundial, el campeonísimo de MotoGP, que lograría ese mismo título de Moto2 en el 2012, ya empezó a demostrar de lo que iba a ser capaz.
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