MOTOCICLISMO

Jorge Navarro: "Del cielo a la mierda"

Jorge Navarro, de 20 años, ganador del GP de Catalunya, se destrozó la pierna izquierda, seis días después de coronarse, entrenándose con niños

Jorge Navarro posa tras la intervención en la clínica Dexeus

Jorge Navarro posa tras la intervención en la clínica Dexeus / PERIÓDICO

EMILIO PÉREZ DE ROZAS / BARCELONA

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Jorge Navarro (La Puebla de Vallbona, Valencia, 3 de febrero de 1996) es la viva estampa de lo que representa la lucha, el sacrificio, la pelea, la constancia, la insistencia, la perseverancia en el deporte de élite, la conquista de lo más difícil e importante, en definitiva, alcanzar un sueño desde muy, muy, abajo. Pero Navarro también representa el dolor, el desencanto, el sufrimiento y, sobre todo, la desdicha que, a menudo, rodea a los grandes deportistas.

DE LA VICTORIA AL DOLOR

Este muchacho valenciano de 20 años ha vivido, en menos de una semana, en tan solo seis días, el éxtasis que provoca la gloria, alcanzar una meta, y el desgarro que suscita, tanto en su cuerpo como en su alma, una grave lesión, que le apartará durante varias semanas del escenario que le ha convertido en el piloto español nº 39 que gana un gran premio del Mundial de motociclismo. Navarro logró su primera victoria mundialista en Barcelona (5 de junio)Barcelona , tras 36 grandes premios en la élite y siete podios después, para, solo seis días más tarde, producirse una doble fractura de tibia y peroné en su pierna izquierda entrenándose con niños de nueve y diez años en un circuito de karting que hay en Paterna, a 17 kilómetros de su pueblo.

El título más prosaico de esta dura historia podría ser perfectamente ‘del podio al quirófano’ pero Navarro, que pronto abandonará la habitación 609 del Institut Universitari Dexeus, prefiere ser más ácido, duro, real y dice que lo suyo es “del cielo a la mierda”. El firmamento, en efecto, lo conquistó en casa, en Montmeló, en el Circuit, ante los suyos, rodeado de sus seres más queridos, con Adela y Paco, sus padres, con su peña, con sus mejores amigos, en el Adela PacoGran Premio de Catalunya ¡casi nada! La mierda se le vino encima, seis días después, en el Karting KSB, de Paterna, al chocar en la pista con un colega de 10 años, saltar por encima suyo y, al aterrizar, fracturarse, por suerte de forma limpia, la tibia y el peroné izquierdo.

AUTÉNTICA MALA SUERTE

Por la mañana, Jorge había ido a entrenarse con su padre a un circuito de tierra para practicar derrapadas y el control de la moto, pero el trazado estaba “muy roto”, embarrado por las lluvias, peligroso. “Sabes que, papá, volvamos a casa, no estoy cómodo no vaya a ser que me haga daño”, le dijo Jorge Paco. Y se fueron. Pero, después de comer, le entró el gusanillo y recordó que su equipo le había recomendado que practicase el control del freno trasero en las curvas de derechas que es donde más falla, así que le dijo a Paco que se iba al karting a practicar con la ‘motito’ pequeña, la de de 125cc, cuatro tiempos, inofensiva, con la que ellos casi juegan más que correr.

“Hacíamos carreritas y, en una de las salidas, la moto se encabritó, hice un ‘caballito’ y, probablemente, las pastillas de los frenos se separaron un poco así que, cuando la rueda delantera volvió a tocar la pista y tuve que frenar para no tragarme al chavalito de delante, las pastillas no funcionaron del todo, choqué y salí volando, bueno, ni eso, salté por encima del chavalito y, al aterrizar enseguida me di cuenta que me había hecho daño”. Eran las seis de la tarde del sábado de mierda que siguió al domingo de gloria. Los colegas fueron a verle y a decirle “¡venga, Jorge, levanta, dale!” Y él les dijo, rápidamente, “llamar a una ambulancia, llamar a papá, me he roto, me he reventado, tengo algo, no es un esguince, no”.

RECORDANDO A ROSSI

Cuenta Navarro que, nada más palparse la pierna y ver la posición endeble, casi flácida, del pie izquierdo, supo que se había roto. Y, sí, la doble fractura era limpia, pero fea, dolorosa, maldita. Es la misma fractura que el mítico Valentino Rossi se hizo en los ensayos de Mugello-2010, su lesión más grave en 20 años. Adela Paco decidieron trasladar a Jorge Barcelona, donde el pasado lunes fue operado por el doctor Ignacio Ginebreda, responsable de la Unidad de Patología del Crecimiento y Fijación Externa del Institut Universitari Dexeus, ayudado por el doctor Xavier Mir, uno de los médicos de confianza de los pilotos del Mundial. Ginebreda decidió colocarle un enclavado endomedular en el interior de la tibia de 36 centímetros (ver infografía), fijado con dos tornillos bajo la rodilla y otros dos encima del tobillo. La misma solución que le aplicaron a Rossi en el Centro Traumatológico Ortopédico de Florencia. Al ‘Doctor’ le pronosticaron cuatro meses de recuperación y al mes y 13 días ya corría.

PENSANDO EN VOLVER A CORRER

“Podíamos haber adoptado otra solución, como colocar algunas plaquitas y sus tornillos, pero pensamos que la colocación de este clavo, que está hueco por dentro para facilitar la circulación endomedular, le permitirá a Jorge empezar a apoyar el pie mucho antes, de hecho a las pocas horas de la intervención ya caminaba con muletas, y acelerar su recuperación”, explica el doctor Ginebreda. En el quirófano, mientras el doctor Mir mantenía alineada la tibia, Ginebreda introdujo el clavo de titanio y vanadio en su interior. “El peroné ni lo tocamos, pues cuando pones recta la tibia, el peroné se coloca solo”, cuenta el especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología.

“Hemos tenido suerte que la fractura fuese limpia y no afectase nada alrededor de los huesos”, explica Mir. “Durante estos días en muy importante que la herida no se infecte, que no tenga problemas de piel o músculos ya que, al no tener afectadas las articulaciones, rodilla y tobillo, podrá empezar la recuperación más deprisa”. Es evidente que Navarro no podrá participar, la próxima semana, en el GP de Holanda, que se disputa en la ‘catedral’ de Assen. “No nos hemos puesto plazo alguno”, explica Mir ante la mirada de Adela y Jorge. “Estos muchachos son de acero, su preparación física es extraordinaria, sus deseos de recuperarse infinitos y todo ello hace que se conviertan en los pacientes ideales en el sentido de que ese coraje y ganas de volver a competir es lo que les permite recuperarse antes de lo previsto”.

MÁS DE DOS AÑOS CON CLAVO

Rossi corrió durante casi tres años (2010-2012) con un clavo similar en el interior de su tibia derecha y, al extraérselo, cómo no, se lo enseñó a todo el mundo conservando el hierro como un trofeo. Con él y sin él, el ‘Doctor’ siguió manteniéndose en la élite mundial. Navarro no tiene prisa por volver, aunque es el segundo gran aspirante al título mundial de Moto3 tras el surafricano Brad Binder, del que le separan 44 puntos. “Solo quiero volver a caminar solo, sin muletas, ponerme en manos del fisio, pasar al gimnasio y, luego, volver a correr. Sí, por qué, en el Karting KSB. Tuve mala suerte, nada más”.