Márquez: "Sonrío mucho y parece que esto es fácil, pero es dificilísimo"

Marc Márquez, que este domingo ha celebrado su cuarto título, su segundo cetro consecutivo en MotoGP, en la categoría reina, recibiendo de un espectacular samurái (en realidad, un mecánico del equipo de su hermano Àlex Márquez) una no menos espectacular katana, ha confesado, nada más bajarse del podio de Motegi, donde ha tenido suficiente con ser segundo para asegurarse su segundo cetro, destrás del mallorquín Jorge Lorenzo (Yamaha), que no tenía palabras para expresar lo que pensaba.

"Solo diré que, aunque sonrío siempre, esto no ha sido nada fácil, nada fácil. Aunque he ganado 11 carreras, esto ha costado mucho", ha subrayado. "¿Por qué?", le preguntamos. "Sobre todo por la presión que he tenido que soportar, por los dos errores consecutivos que cometí en Misano-Adriano y Mortorland, que me hicieron llegar aquí, a Motegi, Japón, la casa de Honda, con la obligación de proclamarme campeón… sin errores, sin caerme. Y eso, cuando eres líder y peleas con grandioso pilotos como Valentino Rossi, Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo, pesa mucho, mucho", ha explicado.

La felicidad de todo el equipo

"Evidentemente, estoy feliz, muy contento, mucho", ha comentado rodeado de todo su equipo, que mostraba una pizarra, idéntica a la del anterior título, en la que se podía leer: "Gracias / tu equipo / una vez más". "Y estoy feliz por todos ellos, por mi familia, que es donde empezó todo, por mis amigos, por mi equipo, por Emilio Alzamora --mi mánager--, por Honda y, especialmente, por aquellos que han confiado en mí, sobre todo la afición que me sigue, todos los 93 que he visto en las tribunas rojas", ha proseguido.

"Una cosa tengo clarísima: cuando pisé MotoGP, el pasado año, no podía ni imaginarme que podía ganar dos títulos seguidos en los dos primeros años que corría entre los mejores del mundo. Eso es impresionante, incluso para mí, que no lo pensé jamás. Insisto, yo sonrío mucho y parece que esta conquista haya sido fácil, pero ha sido dificilísimo", ha añadido.

"Sé que muchos habían dudado de que lo lograra este domingo en Japón. Lo entiendo, el fin de semana ha sido complicadísimo, nada fácil, parecía que alguien nos había mirado mal --ha detallado al bajar del podio--. Pero el ensayo previo a la carrera ha sido fantástico y, aunque he vuelto a hacer una salida irregular, sabía que tenía ritmo y mucha confianza. Se trataba de olvidarse de Jorge [Lorenzo], que estaba convencido de que iba a ganar, y centrarme en superar a Dani [Pedrosa] y a ‘Vale’ [Rossi], que ha costado lo suyo”.

Ayudar a Àlex en Moto3

"En el inicio del gran premio, no era yo. No sé, posiblemente las dos caídas de Misano y Aragón aún seguían metidas en mi cabeza. Mi cerebro debía pensar: '¡Ojo, no te vuelvas a caer!", ha reconocido el mayor de los Márquez inmediatamente. Pero enseguida se ha centrado y ha ganado en confianza. "Sabía que podía hacer una gran carrera y, la verdad, ahora que lo he logrado no puedo dejar de pensar que tengo dos títulos en dos años, dos títulos consecutivos que no ha logrado nadie a mi edad. ¡Increíble!".

Preguntado sobre qué nos espera en el futuro, ha sido claro: "Primero, una gran fiesta, que nos la merecemos todos y, después, ayudar a mi hermano Àlex ha tratar de ganar el título de Moto3. Ese será, desde mañana, mi objetivo prioritario. Bueno, y disfrutar de Australia, Malasia y Valencia, donde espero hacer tres grandes carreras, pero ya a mi rollo, sin presión".