Aumenta la edad de los solicitantes

«Antes de la crisis, hasta el 2008, se acercaban a nuestras oficinas sobre todo jóvenes de baja cualificación. Desde el 2010 ha ido subiendo la edad y ya abundan los mayores de 45 años y cualificados entre los solicitantes. Eso nos ha obligado a hacer planes específicos para esa edad», explica Lorenzo Rivarés, director de selección y empleo de Eulen Flexiplan, una de las grandes empresas de trabajo temporal (ETT) que ha sido autorizada para intermediar en el mercado de trabajo.

Rivarés es un defensor del modelo anglosajón, que tiene una compensación económica mínima de 3.800 libras (algo más de 5.100 euros) por cada parado que reinserte, y del modelo holandés donde «la agencia privada y el servicio público están en el mismo edificio, la comunicación es más rápida y la colaboración más estrecha». En España, a una firma como Eulen solo le compensa ir a estos concursos por el prestigio que tiene como ETT, no por lo que reciben económicamente que es «muy justo».

En España los precios máximos varían según la edad del trabajador y el tiempo que lleve en el paro, pero por un joven de hasta 30 años y un año apuntado en las oficinas del SEPE, la cuota máxima es de unos 400 euros. «El problema es el tiempo y los efectivos que hemos dedicado a esta colocación», explica. Además este precio se va reduciendo porque las agencias se presentan a distintos concurso en los que por regla general se vuelve a pedir una rebaja de las tarifas, incluso del 50%.

VENTANILLA ÚNICA / También discrepa de que la duración mínima de los contratos sea de seis meses. «Es algo alejado de la realidad porque con esta duración son apenas el 10% de los que intermediamos», señala el directivo de Eulen. «Habría más éxitos si se compensara por contratos de menor duración», subraya, «pero por algo habría que empezar».

«No queremos ser la competencia del SEPE, pero sí sabemos hacer nuestro trabajo», afirma Rivarés, que considera imprescindible una «ventanilla única» en la que se faciliten los datos de los parados.