Al contrataque

Mental, moral, mortal

Un hombre enciende una vela en memoria de los niños y las mujeres fallecidos en la escuela de Newton.

Un hombre enciende una vela en memoria de los niños y las mujeres fallecidos en la escuela de Newton. / et/YL

Manel Fuentes

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El tiroteo deNewtown, Connecticut, nos ha dejado 27 muertos con 20 féretros infantiles, tras el ataque a una escuela por parte deAdam Lanza,un chaval de 20 años, que tras coger las armas que tenía su madre y matarla, hizo lo propio con los niños que iba encontrando a su paso por el colegio Sandy Hook.

¿Si su madre no hubiera tenido armas en casa, la cosa habría terminado igual? Yo creo que no. La cosa ya viene de antiguo: antes losdisparosindiscriminados se habían dado en hamburgueserías, cines, centros educativos como el de Columbine, y demás espacios públicos cotidianos.

En el 2007, la masacre deVirginia Tech dejó 32 muertos; este verano, la de un cine de Aurora enColorado, 12 muertos, en el estreno de la última de Batman; y en Newtown, 27, 20 de los cuales, niños que no llegaban a los 10 años.

El escritorHaruki Murakamilo tuvo siempre claro. Siempre cuenta que si haces aparecer una arma en un libro, normalmente es porque tarde o temprano va a haber un muerto.

Armas, ¿para qué?

Pero en Estados Unidos, algo que parece de Perogrullo como es el hecho de que si tienes armas a tu alcance lo más normal es que las utilices con consecuencias monstruosas no sirve para que se cambien las leyes y se persigan las pistolas.

En el 2011, tras el tiroteo a la congresista demócrataGabby Giffords,que no acabó con la vida de esta pero dejó seis muertos, entre ellos una niña de 6,Barack Obamadijo que seguiría colaborando con el Congreso para restringir el acceso a las licencias de armas. ¿Se hizo algo? No.

La matanza de Connecticut reabrirá el debate durante unos días sobre si los ciudadanos tienen que tener acceso libre o no a las armas. Aunque todos saben que será del todo estéril. Son un negocio consolidado, y en esta época con esto no se juega. Nos dirán que las armas en USA ya forman parte de la cultura de la gente y que no se pueden cambiar así como así las normas en caliente. Y cuando pase un tiempo, tal vez solo dos o tres semanas, y se enfríe la memoria colectiva, ya nadie lo verá imprescindible.

Fracaso social

Y así daremos muestras una vez más de nuestra degradación mental, al no actuar inteligentemente, de nuestra degradación moral por no actuar a sabiendas de que habrá más matanzas y nos seguiremos entregando a esta inercia mortal, donde por una inacción a la que nos vemos empujados por motivos oscuros no resolvemos las cuestiones de las que sí sabemos la solución, pero que nos negamos a aplicar.

Tenemos que asumir nuestro fracaso como sociedad al generar comportamientos como el deAdam Lanza, y al no poder comprender ni frenar eficazmente los motivos de su demencia. Es verdad, ahí vamos perdidos. Pero siendo conocedores del lado oscuro que puede habitar en nosotros, ¿por qué seguimos poniendo la serpiente al alcance de la mano?

En Newtown hay 27 muertos, 20 de los cuales son niños que no llegan a los 10 años.