Maduro visita una Argentina cada vez más parecida a Venezuela

El sucesor de Chávez firma varios acuerdos con su homóloga Cristina Fernández de Kirchner antes de viajar a Brasil

Participantes en el multitudinario acto en Buenos Aires muestran un cuadro en el que aparecen Nicolás Maduro y Cristina Fernández.

Participantes en el multitudinario acto en Buenos Aires muestran un cuadro en el que aparecen Nicolás Maduro y Cristina Fernández. / VRC LM**MEX**

ABEL GILBERT / Buenos Aires

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Nicolás Madurodejó hace unos días unaVenezuelaprofundamente dividida entre chavistas y opositores y, tras una breve visita a Uruguay, este miércoles ha aterrizado en Argentina, donde la tensión social y política empieza a alcanzar las altas temperaturas de su propio país. Uno y otro parecen funcionar en espejo en ciertos aspectos.

En Buenos Aires, el presidente venezolano se ha dado, en su primera gira por los países delMercosur, un baño de masas. Un estadio de fútbol lleno hasta la bandera lo ha recibido con entusiasmo. Maduro ha agradecido el "hermoso acto de solidaridad" y le ha agradecido a Dios por "haber servido a la causa de dos gigantes de América como Néstor Kirchner yHugo Chávez". El mitin lo han organizado los movimientos que con mayor entusiasmo apoyan a la presidentaCristina Fernández de Kirchner y que encarnan, a los ojos de la iracunda clase media argentina, las corrientes que radicalizan al Gobierno.

Maduro, que ha firmado diversosacuerdos de colaboración con Kirchner, ha recordado ante los presentes el acuerdo al que llegaron en el 2005 Chávez, Kirchner y Luiz Inácio 'Lula' da Silva para frenar una iniciativa de Estados Unidos que buscaba convertir al continente en una gran zona de libre comercio. "Ni libre ni comercio ni para las Américas, al frente del diablo mayor George Bush se enterró el ALCA gracias al esfuerzo de nuestros líderes que vinieron a fundar una época", ha subrayado el heredero del fallecido líder bolivariano.

Los elogios de Cristina Fernández

Cristina Fernández de Kirchner, uno de los primeros líderes que reconoció de inmediato eldiscutido triunfo electoral de Maduro, no ha escatimado elogios para el sucesor de Chávez. "Es la primera vez que nos visita un presidente de la República Bolivariana de Venezuela que no es Hugo Chávez Frías", ha señalado la presidenta antes de revelar que la llegada de su homólogo venezolano "hace revivir sentimientos y emociones muy especiales". "Recibirte, Nicolás, es una gran alegría y al mismo tiempo una gran tristeza --ha apuntado--. Parece mentira en menos de tres años tantas cosas que han pasado, y que uno pueda soportarlas y estar de pie, pero acá estamos, de pie".

La presidenta ha destacado la "complementariedad" entre las economías de ambos países, "tan perfecta casi de rompecabezas". Argentina compra energía a cambio de alimentos. Pero también hay analogías negativas. La brecha entre el dólar oficial y el que se vende en el mercado paralelo, en la ciudad de Buenos Aires, está alcanzando ritmos venezolanos: casi duplica el valor fijado por el Banco Central. La presidenta acaba de denunciar presiones de sectores económicos para que devalúe el peso, como ha ocurrido en Venezuela semanas antes del deceso de Chávez.

Presidencia de Mercosur

Tras su visita a Argentina, Maduro continuará su gira por Brasil, el otro aliado estratégico de Caracas. Venezuela asumirá la presidencia temporal de Mercosur en el segundo semestre de este año. Su entrada a está unión aduanera tuvo lugar cuando uno de sus socios, Paraguay, estaba suspendido por la escandalosa destitución de su presidente Fernando Lugo. La institucionalidad de ese país acaba de normalizarse con la victoria electoral del colorado Horacio Cartes.

Mientras Maduro arengaba a los militantes de Unidos y Organizados, uno de sus adversarios en Venezuela, Leopoldo López, denunciaba en la misma ciudad de Buenos Aires "la persecución política y violencia oficial que impera en Venezuela".