Varios tiroteos desatan el terror en Ottawa

Ottawa, la capital de Canadá, ha despertado este miércoles de su habitual somnolencia después de que varios tiroteos en el centro de ciudad desataran el caos. Todo empezó cuando un hombre armado mató a un soldado que hacía guardia junto al monumento nacional a los veteranos de guerra y acto seguido se dirigió al edificio del Parlamento, donde a esas horas se congregaban la mayoría de legisladores. Docenas de disparos resonaron en los pasillos del Parlamento hasta que la policía abatió al asaltante. No fueron los únicos sobresaltos porque se informó también de un tercer incidente y la posibilidad de más pistoleros.

Cinco horas después de que las primeras llamadas al 911 alertaran a la policía de los disparos junto al memorial de guerra, la confusión seguía siendo la tónica dominante. Las autoridades pidieron a la población del centro de la capital que no saliera a la calle y se apartara de las ventanas. Varios colegios, la universidad y los comercios cerraron sus puertas, mientras se ponía en alerta a las bases militares. El pánico se acentuó después de que los medios locales informaron que se había producido un tercer tiroteo en las inmediaciones del centro comercial Rideau Center y que fuentes policiales aseguraran que se buscaba a otros «dos o tres sospechosos».

Más tarde la policía negó ese último incidente, aunque no descartaba que hubiera algún otro asaltante todavía suelto. Inicialmente todo hizo presagiar que se trataba de un ataque coordinado, pero para ello debería confirmarse que más de una persona participó en la operación. Hace solo una semana Canadá elevó el nivel de alerta terrorista, una precaución lógica, teniendo en cuenta que el país participa en los bombardeos aéreos que EEUU y algunos de sus aliados llevan a cabo en Irak contra los yihadistas del Estado Islámico.

Atropello

De hecho, este mismo lunes dos soldados fueron atropellados en la provincia de Quebec por un canadiense converso al islam recientemente radicalizado. Uno de ellos murió y la policía clasificó el incidente como un atentado terrorista, perpetrado por un «lobo solitario». Esa posibilidad planeaba también ayer en el ambiente, pero la policía no dio ningún detalle sobre la identidad del asaltante al Parlamento, y es pronto para saber si podría tratarse de un ataque yihadista.

El primer ministro canadiense, el conservador Stephen Harper, se encontraba en el Parlamento cuando se produjeron los disparos, pero fue evacuado sin que sufriera ningún daño. Tampoco hay heridos entre los congresistas, aunque un policía recibió un disparo en la pierna. «Estoy estupefacto y triste», dijo el alcalde de Ottawa, Jim Watson. «Nuestros pensamientos y oraciones están con los heridos».

Todo empezó poco antes de las diez de la mañana, hora local, junto al memorial de guerra. «Escuché un disparo y miré por la ventana. El asaltante llegó desde el oeste, apuntó directamente al joven que hacía guardia y le disparó dos veces», contó un testigo al diario 'Mail and Globe'. Ese joven era un soldado en la reserva, que murió más tarde en el hospital. Otros testimonios aseguran que el asaltante, un hombre de pelo largo y moreno, robó a continuación un coche a punta de pistola y condujo apenas 350 metros hasta la entrada del Parlamento. Una vez allí, entró por la puerta principal sin que nadie se lo impidiera. «Nos ha cogido de sorpresa», reconoció después un alto cargo de la policía montada.

Una vez dentro se desató el pánico. «Disparos durante la reunión parlamentaria. Al menos 30», tuiteó el diputado Tony Clement.