CASTIGO EJEMPLAR

Una pareja es condenada a duras penas de cárcel por amenazas racistas en EEUU

Jose Torres y Kayla Norton profirieron insultos y apuntaron con una pistola a un grupo de afroamericanos que celebraban una fiesta infantil

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Una pareja estadounidenses, miembros de un grupo racista, ha sido condenada a una dura pena de cárcel por amenazar con armas e insultar a un grupo de negros que estaba celebrando una fiesta de cumpleaños para niños en el estado de Georgia. De nada les ha servido a Jose “Joe” Torres y a Kayla Norton pedir perdón entre llantos durante el juicio. El tribunal los ha sentenciado a 13 y 6 años de cárcel respectivamente, según ha informado la cadena estadounidense 'CNN'.

Los hechos ocurrieron en el mes de junio del 2015, cuando Torres y Norton, que forman parte del movimiento “Respect de Flag” (Respeta la Bandera) pasaron junto a la fiesta en un convoy formado por varios vehículos con banderas supremacistas blancas, y tras detener el vehículo, se acercaron a insultar, increpar y amenazar de muerte a punta de pistola a varios de los asistentes a la fiesta infantil. 

"Lo que se ha juzgado aquí no es el haber ondeado la bandera confederada, sino que un grupo de personas se pasearan  por la comunidad, bebiendo alcohol, amenazando e intimidando a nuestros ciudadanos simplemente por el color de su piel", ha asegurado Brian Fortner, Fiscal del distrito de Douglas, un barrio periférico de la ciudad de Atlanta. 

'A LOS PEQUEÑOS TAMBIÉN'

"El convoy de vehículos pasó por la residencia donde las víctimas estaban haciendo hamburguesas y perritos calientes a la parrilla. Era una fiesta de cumpleaños infantil, con un castillo hinchable y un DJ", ha escrito el fiscal en su página oficial de Facebook. "Torres, que había sacado una pistola de su vehículo, apuntó el arma hacia el grupo de afroamericanos de la fiesta y les amenazó con matarles. Otros miembros del grupo aprovecharon el momento para gritar 'a los pequeños también les puedes dar'", añade en su escrito Fortner.

Durante el juicio, Torres rompió a llorar, lo mismo que Norton. "Esa no era yo" y dirigiéndose luego a parte de la víctimas presentes en la sala, les dijo: "jamás me hubiera levantado para deciros esas cosas. Siento mucho lo que sucedió. Lo siento mucho".

Hyesha Bryant, una de las asistentes a la fiesta aceptó las disculpas de la pareja durante el juicio, pero recordó que los hechos afectaron su "vida" y la de sus "hijos".