Un tribunal condena a cadena perpetua y a 21 años de cárcel a dos menores israelís por matar a un palestino

Los sentenciados ayudaron a un adulto a secuestrar, estrangular y quemar vivo a un chico de Jerusalén de 16 años

Los familiares del adolescente palestino Mohamed Abu Jdeir que murió en 2014, muestran su retrato en el exterior de la Audiencia en Jerusalén.

Los familiares del adolescente palestino Mohamed Abu Jdeir que murió en 2014, muestran su retrato en el exterior de la Audiencia en Jerusalén. / periodico

ANA ALBA /

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El Tibrunal de Distrito de Jerusalén ha sentenciado a dos menores israelís por el secuestro y asesinato del adolescente Mohamed Abu Jdeir, de 16 años, al que tres israelís quemaron vivo en julio del 2014. Uno de los menores -de 17 años y que actuaron junto a un adulto- ha sido condenado a cadena perpetua y el otro, a 21 años de cárcel y a pagar cada uno 30.000 shekels (unos 6.861 euros) a la familia de la víctima.

Los jueces estimaron que el condenado a 21 años no participó directamente en el asesinato de Abu Jdeir sino en las acciones que lo precedieron. “Es el más joven del grupo y tiene la posibilidad de rehabilitarse. Sus acciones también son salvajes porque capturó al fallecido, evitó que se resistiera y ayudó a estrangularlo. No obstante, no tomó parte físicamente en el último paso que llevó a golpear (a Abu Jdeir) y rociarle con gasolina todo el cuerpo”, señala la sentencia.

EXAMEN PSIQUIÁTRICO

El tribunal aún no ha emitido la condena para el principal acusado del caso, Yosef Chaim Ben-David, de 31 años, al que declaró culpable, pero no pudo sentenciar porque sus abogados presentaron un informe que alegaba problemas psiquiátricos y que aún se está examinando.

Los dos menores mantienen que Ben-David, colono del asentamiento judío de Geva Binyamin (Adam), en Cisjordania, planeó el crimen y los presionó para que le ayudaran. Los chicos aseguraron que les dio pastillas y bebidas energéticas unas horas antes del asesinato y que lo cometió él solo. 

No obstante, la fiscalía señaló que participaron en el crimen por voluntad propia, tal y como afirmaron cuando se les tomó declaración en el primer interrogatorio policial.

ASESINATO POR VENGANZA

Los acusados señalaron que el asesinato de Abu Jdeir, declarado "víctima del terrorismo" por Israel, fue “en venganza” por el de tres adolescentes israelís, estudiantes de escuelas religiosas en Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel. Los chicos fueron raptados por dos palestinos, en junio del 2014, cerca del bloque de colonias judías de Gush Etzion. Luego los mataron.

Ben-David y los dos menores secuestraron a Abu Jdeir de madrugada cerca de su casa, cuando se dirigía a la mezquita, en el barrio de Shuafat, en Jerusalén este, zona ocupada por Israel. Lo metieron en un coche, lo golpearon brutalmente y lo trasladaron a un bosque donde le metieron gasolina en la boca, lo rociaron y le prendieron fuego estando aún vivo.