SOSPECHAS DE UN GRUPO VINCULADO A AL QAEDA

Secuestradas en Kenia dos trabajadoras españolas de Médicos sin Fronteras

El campo de refugiados de Dadaab, en Kenia.

El campo de refugiados de Dadaab, en Kenia. / periodico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dos trabajadoras españolas deMédicos Sin Fronteras (MSF) España han sido secuestradas este jueves en el campo de refugiados keniano de Dadaab, según ha informado a EfeJavier López Cifuentes, alto cargo de la Alta Comisaría de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) enKenia.

Una de las dos trabajadoras es dePalafrugell (Girona). Se trata de Montserrat Serra Ridao, de 40 años, profesora en excedencia que desde hace años está implicada en tareas de cooperación en el extranjero. La otra es de Madrid, según han confirmado a Efe fuentes próximas a la oenegé. Las dos cooperantes españolas pertenecen al aparato logístico de MSF y viajaban en un vehículo que fue asaltado a tiros y cuyo conductor resultó herido.

La organización también confirma que ambas trabajadoras estaban en el campo de refugiados keniano de Dadaab, a unos 100 kilómetros de la frontera con Somalia y que el secuestro se ha efectuado cuando las cooperantes viajaban en un vehículo que ha sido tiroteado y cuyo conductor, de nacionalidad keniana, ha resultado herido y se encuentra hospitalizado y estable.

Sospechas y desmentido

Según una televisión keniana, los secuestradores son miembros del grupo islamista somalíAl Shabaab. La policía keniana también sospecha de este grupo ligado a Al Qaeda y ya ha procedido a sellar la frontera entre los dos países, según informa la agencia Reuters. Sin embargo, la milicia islamista somalí Al Shabaab ha negado a través de un portavoz que esté implicada en el secuestro. "Estamos al tanto de estos secuestros, pero no estamos tras ellos", ha aclarado un portavoz miliciano en declaraciones a Reuters desde el sur de Somalia. "No han sido traídas a una zona bajo nuestro control", ha añadido.

Las fuerzas de seguridad kenianas y somalíes han iniciado un amplio despliegue en la frontera común para tratar de localizar a las cooperantes.

De hecho, tras conocerse la noticia, las autoridades han procedido a cerrar las fronteras. "Hemos movilizado a todos los oficiales y alertado a los que están en la frontera para garantizar que ningún vehículo salga del país hacia Somalia. Toda la zona fronteriza está sellada", ha indicado el comandante de la policía de la Provincia Nororiental, Leo Nyongesa.

Raptos de extranjeros

López Cifuentes ha recordado que "hace unas semanas" secuestraron en Dadaab un vehículo todoterreno perteneciente a la organización no gubernamental CARE International y a su conductor, que aún no han aparecido.

En las últimas semanas, en Kenia se han registrado varios secuestros de extranjeros en zonas cercanas a la frontera con la volátil Somalia, en guerra civil desde 1991.

El último secuestro, de una ciudadana francesa discapacitada, se produjo el pasado 1 de octubre en el turístico archipiélago keniano de Lamu (este). El Gobierno keniano ha enviado recientemente varios equipos de seguridad para vigilar la actividad en la porosa frontera que comparte con Somalia.

Testimonio

La directora de Especiales de la productora La Fábrica de la Tele, Neus Sala, que se encuentra en Dadaab grabando un reportaje, dijo en conversación telefónica con Efe que varios testigos le habían contado que los secuestradores eran tres hombres somalíes que se hacían pasar por refugiados. "Los testigos -que estaban informando a la policía cuando hablamos con ellos- dijeron que las chicas, dos logistas de MSF que llevaban unos dos meses en Dadaab, se estaban preparando para construir un dispensario médico", aseguró Sala.

Según los testigos citados por Sala, los secuestradores, que llevaban armas escondidas bajo los chalecos que vestían, cogieron a las trabajadoras, lanzaron una bomba que no explotó y huyeron en un vehículo mientras realizaban disparos al aire. Siempre según la versión de Sala, los refugiados somalís indicaron que las caras de los secuestradores no les eran familiares.

Dos helicópteros

En declaraciones a la emisora local Capital FM, el portavoz de la policía de Kenia, Erick Kiraithe, apuntó la posibilidad de que los asaltantes pertenecieran a la milicia fundamentalista islámica Al Shabab, que combate al Gobierno Federal de Transición somalí para instaurar un estado musulmán de corte wahabí en Somalia. "Hay una gran operación en la zona para rescatar a las mujeres", señaló Kiraithe, quien agregó que varias agencias de seguridad forman parte de este dispositivo, que incluye dos helicópteros.

Gabinete de crisis

Médicos Sin Fronteras, que tiene su sede en Barcelona, ha creado un gabinete de crisis para recabar más información. La Embajada de España en Kenia y el departamento de emergencia consular de Exteriores han activado también las primeras medidas para afrontar la situación y mantener informados a los familiares. La ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, quien está regresando de Viena, permanece al tanto del asunto, al igual que la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez.

Rodríguez estuvo en el campamento de Dadaab, considerado el mayor del mundo, el pasado 22 de julio para trasladar el apoyo de España ante la hambruna y la sequía que sufre la población del Cuerno de África.

El último precedente de secuestro de una ciudadana española en esta región tuvo lugar a finales de 2007, cuando la médica Mercedes García y la enfermera argentina Pilar Bauza, también trabajadoras de MSF, permanecieron en cautiverio durante siete días en la región semiautónoma de Puntlandia (Somalia).