Sarkozy, imputado por "abuso de debilidad" en el caso Bettencourt

Nicolas Sarkozy ha sido imputado por "abuso de debilidad" en el caso de la multimillonaria Liliane Bettencourt, dentro de la investigación abierta sobre la supuesta financiación ilegal de la campaña que le llevó al Elíseo en 2007.

El expresidente francés, de 58 años, que hasta ahora tenía del estatus de "testigo asistido" en el caso, ha sido citado por el juez Jean-Michel Gentil en el Palacio de Justicia de Burdeos. Tras varias horas en las que mantuvo careos con al menos cuatro personas que trabajaban para la heredera del imperio cosmético l¿Oreal, Sarkozy ha abandonado las dependencias esta noche en calidad de imputado.

El objetivo del juez era determinar cuántas veces el exjefe del Estado visitó el domicilio de la entonces octogenaria Bettencourt antes de las elecciones con el objetivo de determinar si abusó de la debilidad para conseguir fondos. Hasta ahora, Sarkozy solo ha reconocido haber visitado a la rica heredera en una ocasión.

Recurso para pedir la nulidad

Entre las personas con las que ha mantenido un careo figura el antiguo mayordomo de la mujer más rica de Francia, cuyas grabaciones ocultas pusieron a la justicia sobre la pista de una presunta financiación ilegal. Como este delito ha prescrito, el juez se ha centrado en establecer si Sarkozy se benefició de la pérdida de facultades mentales de Bettencourt, puesta bajo tutela hace un año a petición de su hija Françoise.

El abogado del expresidente, Thierry Herzog, ha calificado de "incoherente en el plano jurídico e injusta" la imputación. Herzog ha anunciado la presentación inmediata de un recurso para solicitar la nulidad de la decisión judicial.

Sarkozy es el segundo expresidente francés imputado por la justicia. Su antecesor en el Elíseo, Jacques Chirac fue imputado, también poco después de perder la inmunidad inherente al cargo de presidente, en el caso de los empleos ficticios del Ayuntamiento de París. Fue condenado a dos años de prisión con remisión de pena.