Rusia veta otra resolución de la ONU sobre Siria

Por octava ocasión desde que comenzó la guerra de Siria, Rusia ha usado su poder de veto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para frenar una resolución. El texto, preparado por el Reino Unido, Francia y Estados Unidos, condenaba el ataque con armas químicas cometido el 4 de abril en Jan Sheijún, en la provincia de Idleb, y llamaba a una investigación de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) en la que se urgía a dar pleno acceso a los investigadores. China, otro de los cinco miembros permanentes del Consejo, que en ocasiones anteriores se ha alineado con Moscú y se ha sumado a los vetos para proteger a Siria, esta vez se ha abstenido.

Antes de usar su veto, el representante de Moscú ante la ONU, Vladimir Safronkov, ha argumentado que someter el texto a votación “no sirve un propósito útil”. Su razonamiento es que este jueves hay una reunión en La Haya de la OPAQ. Safronkov también ha relatado que en la reunión que han mantenido en Moscú este miércoles el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, Rusia ha sugerido a Washington enviar un comunicado conjunto urgiendo a enviar a Siria una misión internacional e independiente para visitar tanto Jan Sheijún como Shayrat, la base de las fuerzas aéreas del gobierno de Bashar el Asad que Estados Unidos atacó el pasado jueves.

CRITICA AL VETO

Matthew Rycroft, embajador del Reino Unido, ha criticado el veto ruso y ha dicho que “es indefendible que Rusia haya elegido proteger a quienes perpetraron estos ataques en vez de trabajar con la comunidad internacional”.

Bolivia también ha votado en contra de la resolución y Etiopía y Kazajistán se han sumado a la abstención.