El perfil

Reportero de todas las batallas

EL PERIÓDICO / Barcelona

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Marc Marginedas es un periodista de asiento inquieto que ama profundamente su profesión. Por eso, siempre que ha tenido oportunidad ha volado lejos de la redacción para hacer reporterismo en el campo de batalla, que es lo que siempre le ha gustado. Desde que empezó su carrera profesional, Marginedas, de 46 años, optó por la política internacional y su objetivo siempre ha sido trabajar en zonas de conflicto, por eso de dar voz a aquellos que no la tienen, explicar lo que se quiere ocultar o evitar que caiga en el olvido el sufrimiento que causan las guerras. Sus dos grandes pasiones son el mundo árabe Rusia.

Su primera corresponsalía fue en el Magreb, con sede en Rabat. Durante los años que residió en esa zona del mundo, Marginedas pasó gran parte del tiempo en Argelia para cubrir la guerra que entonces libraron el régimen de Argel y los grupos armados islamistas.

Sin apenas periodistas occidentales en ese país, fue testigo excepcional de oscuras matanzas y entrevistó en exclusiva a los líderes del proscrito Frente Islámico de Salvación (FIS) Abdelkader Hachani y Abasi Madani. En 1998, el Gobierno rechazó renovarle la acreditación. Se había convertido en un reportero incómodo para el régimen.

En la caída de Grozni

Fue entonces cuando Marginedas ocupó la corresponsalía de Moscú, donde estuvo hasta el 2002 y cubrió la segunda guerra en Chechenia (1998-2000), con continuos viajes a la república independentista caucásica.

Escribió para este periódico un estremecedor relato de la caída de Grozni en manos rusas tras conseguir entrar de forma clandestina. 'Descenso al infierno', era el título del artículo en el que retrató el sufrimiento de los civiles en los tres meses de asedio.

En el 2002, regresó a Barcelona y desde entonces ha sido el reportero de EL PERIÓDICO en zonas de conflicto. Ha estado en todas las guerras que se han librado en los últimos años. No ha dejado de perfeccionar el ruso y el árabe, idiomas que domina junto al inglés y el francés.

Como reportero de guerra ha realizado diversos viajes a Irak entre los años 2003 y 2010, cubriendo los momentos más álgidos de la invasión (entró por la frontera kuwaití y avanzó hasta Bagdad), la posguerra y repliegue de las tropas españolas.

También ha estado varias veces en Afganistán entre 2006 y 2010. En uno de estos viajes, se desplazó acompañado del fotógrafo Sergio Caro hasta la remota cordillera del Hindu Kush, junto a la frontera con Pakistán, país que también conoce como enviado especial, cuando se adentró en el 2008 en las zonas tribales del oeste del país.

Libro revelador

Marginedas ha cubierto también la guerra de Darfur en el 2004 y la ofensiva israelí en el sur del Líbano, donde burló el cerco israelí a la ciudad de Tiro tras cruzar a pie el río Litani y andar varios kilómetros. En el 2005 cubrió los atentados en el metro de Londres.

Los últimos años los ha dedicado a la primavera árabe y los conflictos que de ella han surgido. En enero del 2011 asistió a las primeras manifestaciones y a la caída y posterior huida del presidente Ben Alí en Túnez.

Ese mismo año pasó dos largas temporadas cubriendo la guerra civil libia. Durante una visita al Hospital Central de Trípoli describió con gran crudeza el sufrimiento de los civiles en la guerra. 'Parapléjicos de Gadafi', fue el reportaje publicado en agosto del 2011 en el que explicaba cómo niños, mujeres y hasta médicos sucumbían al fuego de los francotiradores gadafistas.

Fiel a su interés por el mundo árabe, Marginedas voló de la redacción hacia Siria para explicar el conflicto armado. Lo hizo en tres ocasiones, la última el pasado mes de septiembre cuando fue secuestrado. Marginedas ha permanecido en cautiverio casi seis meses.

Su larga trayectoria profesional está recogida en su primer libro, 'Periodismo en el campo de batalla' (RBA, 2013). En él, Marginedas recoge los momentos más trascendentales de su carrera y desde su experiencia personal desnuda y desmitifica la figura del corresponsal de guerra.

El pasado mayo quedó finalista al 29º Premio Cirilo Rodríguez para corresponsales y enviados especiales de la prensa española. En su discurso de recepción del galardón --que dedicó y entregó a EL PERIÓDICO DE CATALUNYA-- insistió en la necesidad de que los medios de comunicación sigan apostando por la cobertura de los conflictos para que estos no caigan en el olvido. La dotación del premio la entregó a la oenegé Médicos Sin Fronteras por su trabajo en Siria,

Marginedas también fue galardonado el año pasado con el prestigioso Premio Internacional de Periodismo Maria Grazia Cutuli, otorgado por el diario italiano 'Corriere della Sera'.