POLÉMICA EN FRANCIA

Le Pen vincula el acoso sexual en la calle con la inmigración

La presidenta del Frente Nacional sostiene que los extranjeros importan "una cultura que no respeta a las mujeres"

marine le pen

marine le pen / periodico

Eva Cantón / París

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Cuando todavía no se ha apagado en Francia la polémica desatada por la actriz Catherine Deneuve denunciando el “puritanismo” de la campaña contra el acoso sexual, Marine Le Pen ha entrado en el debate aportando su particular punto de vista. La presidenta del Frente Nacional ha condenado el acoso en la calle, pero lo ha vinculado al fenómeno migratorio porque, a su juicio, los inmigrantes importan una cultura que no respeta a las mujeres.

“El acoso en la calle es, en su inmensa mayoría, el hecho de ciudadanos inmigrantes que importan una cultura que no respeta a las mujeres, una cultura de sumisión de las mujeres e incluso, para muchos, la expresión de un desprecio hacia las francesas”, ha declarado este lunes al felicitar el Año Nuevo a la prensa.

El Gobierno francés prepara una ley para penalizar este tipo de comportamientos en la vía pública pero hasta la fecha el delito de acoso en la calle no está tipificado y por lo tanto no hay datos ni cifras que permitan definir el perfil de los agresores, como lo ha hecho alegremente Le Pen.

Más que el acoso sexual, a Le Pen le interesa recuperar los temas clásicos del Frente Nacional, completamente alicaído desde la derrota en las elecciones presidenciales de mayo del 2017. La líder ultraderechista está inmersa en un proceso de refundación del partido, que celebrará en marzo un congreso para definir su nueva estrategia política. Tras el cónclave, los militantes decidirán si el Frente Nacional cambia de nombre.

Nuevo nombre

Le Pen defiende rebautizarlo para eliminar la “fuerte carga emocional” que arrastra la formación ultraderechista, xenófoba y antisemita fundada por su padre, Jean Marie Le Pen, en 1972, y que aún provoca un enorme rechazo en buena parte del electorado francés.

Por otro lado, Marine Le Pen ha reiterado este lunes que no será cabeza de lista de la formación en las elecciones europeas del 2019 -aunque ha dicho que se implicará en la campaña- y ha dejado la puerta abierta a que la candidatura del FN la lidere una personalidad que no pertenezca al partido.

Durante su felicitación a la prensa, Le Pen ha evitado comentar el testimonio de un antiguo trabajador del FN sobre la trastienda de la campaña presidencial, revelaciones publicadas por las webs ‘Mediapart’ y ‘BuzzFeed Neus’, que muestran la poca profesionalidad del partido ultraderechista, una total falta de coordinación y una permanente guerra de clanes.