LA YIHAD EN EUROPA

Noche de terror en París

EVA CANTÓN / PARÍS

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París fue este viernes por la noche el escenario de una auténtica pesadilla que extendió el horror y la confusión por toda la capital. Una serie de ataques casi simultáneos en múltiples lugares a rebosar de gente que, como es habitual los viernes, llenaba las calles de la ciudad, causó más de 100 muertos, docenas de heridos y llevó el pánico y el caos a París, diez meses después de los atentados contra 'Charlie Hebdo'. Al menos siete puntos diferentes fueron blanco de los ataques. En el Estadio de Francia, donde se celebraba el encuentro amistoso entre Alemania y Francia y, en presencia del presidente François Hollande y el ministro alemán de Asuntos Exteriores, se produjo una explosión que pudo escucharse desde el interior del recinto y obligó a suspender el partido. Las imágenes que retransmitían las televisiones eran tremendas, con numerosos espectadores agrupados en medio del césped esperando las directrices de la policía para evacuar el estadio por una sola puerta.

Otro de los ataques tuvo lugar en la calle Alibert, a la altura del restaurante Le Petit Cambodge, donde la gente suele cenar en las coloridas mesas instaladas en la calle.

CUERPOS TENDIDOS

Testigos presenciales que se encontraban en el interior del local Le Carillon, frente a Le Petit Cambodge, señalaron a este diario que escucharon una ráfaga de disparos sobre las 21.30 horas. Inmediatamente se tiraron al suelo y se refugiaron detrás de la barra del local, donde permanecieron hasta que llegaron los efectivos policiales y de bomberos que acordonaron la zona. Al salir a la calle y alejarse del lugar, vieron varios cuerpos tendidos en la calle. "Estábamos en la barra cuando escuchamos algo que parecían petardos y todo el mundo se tiró al suelo. Algunos disparos rompieron los cristales y entraron en el local. A las 21.25 horas llamé al 112. Luego me di cuenta de que el chico que estaba a mi lado tenía un disparo en el costado derecho y otra chica, en la pierna. Había gente que se había desmayado, nos metimos en el fondo del bar y cuando llegó la policía salimos por la puerta trasera", contaba una española.

Esta zona está al lado del animado Canal Saint Martin, próximo a la plaza de la República, en el este de París, un área salpicada de restaurantes, muy frecuentado los fines de semana. El tercero de los escenarios fue la sala de conciertos Bataclan, en la que actuaba el grupo de rock californiano Eagles. Allí se produjo un tiroteo y una toma de rehenes. Al entrar la policía en el local halló más de un centenar de cuerpos sin vida y numerosos heridos. Antes del asalto policial, algunos asistentes al concierto declararon a la emisora BFMTV que habían escuchado a un individuo gritar "'Ala Akbar'" y mencionar que el ataque era "por Siria". La fiscalía antiterrorista de París se ha encargado de la investigación del peor atentado que vive Francia desde 1940.

El Gobierno decretó un plan multiatentado que pone en guardia a los hospitales para que estuvieran preparados para recibir a numerosos heridos. El primer balance a las dos de la madrugada superaba con creces el centenar de fallecidos y numerosos heridos.

CONMOCIÓN

La ciudad estaba prácticamente en estado de sitio. Varias líneas de metro estaban cortadas, especialmente las que pasan por los barrios afectados por los atentados y la circulación de autobuses también fue interrumpida.

Hollande compareció visiblemente conmocionado poco antes de la media noche para anunciar que había decretado el estado de emergencia en todo el territorio y el cierre de las fronteras ante unos ataques terroristas "sin precedentes" con varias decenas de muertos y muchos heridos. "Es un horror", dijo.

El Estado, añadió, ha movilizado todas las fuerzas de seguridad para la neutralización de los terroristas y garantizar la seguridad en los barrios afectados. El Ejército desplegó a 400 soldados en la aglomeración parisina para evitar nuevos ataques. Además del estado de emergencia, inédito en Francia desde el 2005, cuando se produjeron las revueltas en los suburbios, Hollande señaló que algunos lugares se cerrarán.

"Es una prueba terrible a la que estamos de nuevo enfrentados, que sabemos de dónde viene", prosiguió el presidente francés, poco antes de celebrar un Consejo de Ministros extraordinario en el que se adoptarán las medidas para hacer frente a la amenaza terrorista que pesa sobre el país. En el extranjero, desde la Casa Blanca hasta el Kremlim, pasando por MadridLondres o Roma, los jefes de Estado y de Gobierno denunciaron el horror que golpeó París y ofrecieron su colaboración.