Toda la oposición reclama que España no extradite a Hamza Yalçin

España tiene 40 días, aproximadamente hasta el 10 de octubre, para decidir si continúa con el proceso de extradición del periodista kurdo-sueco Hamza Yalçin, detenido en el aeropuerto de El Prat el pasado 3 de agosto por una orden de la Interpol a instancias de Turquía, y en prisión desde entonces. La última palabra la tiene el Consejo de Ministros, pero toda la oposición ha aprovechado este jueves la comparecencia ante la comisión de Justicia del Congreso del ministro Rafael Catalá para reclamar que la extradición sea denegada.

Catalá, que comparecía a petición de ERC, ha explicado que el miércoles se recibió la documentación pertinente remitida por Ankara, que acusa al periodista de pertenecer a un grupo terrorista, y ha prometido "celeridad".

La defensa del periodista presentó un recurso de apelación, desestimado por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, en el que sostenía la "imposibilidad" de la extradición de Yalçin al haberle sido concedida la protección internacional por parte de Suecia y al tener dos penas de muerte pendientes en el país reclamante. Pero Catalá ha asegurado en el Congreso que no caben "valoraciones sobre los motivos y alegaciones" que ofrece Turquía, sino que solo hay que fijarse en el cumplimiento de los requisitos formales que establece el convenio europeo de extradición.  

Derechos humanos

No lo ven así los demás partidos. El diputado socialista Juan Carlos Campo ha pedido explicaciones al ministro de por qué España ha detenido a Yalçin mientras ni Grecia ni Italia lo hicieron cuando pasó por su territorio. Jaume Moya (Podemos) ha apelado a la "defensa de los derechos humanos" y Marcial Gómez (Ciudadanos) ha sostenido que la decisión "no es solo jurídica, sino también política".

"No se trata de revisar el cumplimiento de requisitos formales, sino de apostar por el cumplimiento de los derechos humanos", defiende uno de los abogados de Yalçin, David Aranda. "Turquía está instrumentalizando la Interpol para reprimir la disidencia política que se encuentra fuera de sus fronteras, usando para ello falsas acusaciones de terrorismo", añade.

El 'caso Akhali'

Catalá también se ha referido a las diferentes situaciones de los dos escritores detenidos este mes en España a petición de Turquía. Mientras que el intelectual con nacionalidad sueca está en prisión, el de pasaporte alemán, Dogan Akhali, se encuentra en libertad provisional. Para el ministro, se trata de dos decisiones judiciales distintas por parte de la Audiencia Nacional que, a su juicio, hay que respetar, y en las que "no cabe intervención alguna por parte del Gobierno".