Estrategia electoral de los ultras

Le Pen fragua una alianza de la ultraderecha en Europa

Geert Wilders (en primer plano) y Marine Le Pen, en una rueda de prensa conjunta, ayer, en La Haya.

Geert Wilders (en primer plano) y Marine Le Pen, en una rueda de prensa conjunta, ayer, en La Haya.

ELIANNE ROS / París

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La extrema derecha teje meticulosamente su tela de araña sobre Europa. Con el objetivo de articular un frente común de los partidos populistas en las elecciones europeas del próximo mayo, la presidenta del Frente Nacional (FN), Marine Le Pen, multiplica los encuentros con los líderes de la ultraderecha. Ayer se reunió en La Haya con Geert Wilders, líder del Partido por la Libertad (PPV), la ultraderecha holandesa, que la recibió en el Parlamento con un "bienvenida a los Países Bajos".

Impulsada por el ascenso que le auguran las encuestas -24% de los votos- tras una eficaz operación de moderación de la imagen del partido, Le Pen encabeza un movimiento que va más allá de las fronteras que pretende restablecer. Busca una alianza con vistas a la creación de un grupo populista en el Parlamento europeo. Para ello hacen falta 25 de los 766 escaños de la cámara en un cuarto de los estados miembros de la UE. Formar parte de un grupo permite disponer de medios y dinero adicionales. Actualmente el FN tiene tres eurodiputados, el PPV cuatro y aspiran a incorporar al belga Vlaams Belang, la italiana Liga Norte, la alemana Alternativa por Alemania y el austríaco Partido de la Libertad

Diputada en Estrasburgo, Le Pen  repite candidatura en el 2014. Su estrategia es simple: atacar al enemigo desde dentro. Ayer tuvo ocasión de comprobar que cuenta con admiradores en el norte de Europa. "Es una política muy importante, podría ser la próxima presidenta de Francia", dijo de ella Wilders, conocido por su islamofobia. En las legislativas del pasado año, recibió un fuerte revés tras una campaña centrada en un visceral rechazo a Europa.

Operación inquietante

Pero no todo fueron parabienes en la capital holandesa. Fuera del Parlamento, una veintena de militantes "antifascistas" exhibieron pancartas contra Le Pen y contra el racismo. "Esta alianza me parece peligrosa", opinó un manifestante. "Estamos contra Wilders, Le Pen y todos aquellos que quieren polarizar nuestra sociedad", clamó convencido de que los populistas europeos están demasiado divididos para sellar un acuerdo.

De momento, la alianza entre la ultraderecha francesa y la neerlandesa ha empezado a andar. Wilders y Le Pen, que lucen un mismo tono de rubio oxigenado, anunciaron un acuerdo "histórico" para las europeas. Pese a sus diferencias -Wilders quiere prohibir el Corán, que compara con el 'Mein Kampf' de Hitler- prevaleció la voluntad de unirse en el Parlamento a fin de "liberar" a sus respectivos países de la UE.

Bruselas, "Estado nazi"

"Hemos tomado la decisión , con otros movimientos patriotas, de aliarnos en una misma dinámica de trabajo", proclamó Le Pen, que admitió ser "menos radical" que Wilders con el islam. Su nuevo socio no pareció haber tomado nota de la estrategia francesa de dulcificar el mensaje. "Hoy se marca el inicio de la liberación de ese monstruo llamado Bruselas", subrayó Wilders, que no dudó en calificarlo de "Estado nazi". "Un matrimonio no esta obligado a estar de acuerdo al mil por cien", relativizó Marine. No está claro que, sobre esta base, ambos logren federar a los euroescépticos.