La crisis política venezolana

Maduro asegura que "nada ni nadie" lo sacará del Gobierno

Nicolás Maduro con su esposa en Caracas

Nicolás Maduro con su esposa en Caracas / periodico

ABEL GILBERT / BUENOS AIRES

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El presidente de Venezuela Nicolás Maduro recordó el primer alzamiento militar de Hugo Chávez en el peor escenario posible: la oposición, que tiene mayoría absoluta en la Asamblea Nacional (AN) busca no solo acotar su poder diario: también su período de Gobierno. El 24 aniversario de aquella jornada a la que el chavismo le asigna tintes épicos y sus adversarios califican de "golpe de Estado", Maduro aseguró que "nada ni nadie" lo sacará del Palacio de Miraflores.

El presidente le atribuye a Herny Ramos Allup, el presidente de la AN, las maniobras para desplazarlo. "Ramos Allpup cree que va ser presidente, él sueña que viene a gobernar a Venezuela otra vez (…), aquí te esperamos", dijo durante el acto conmemorativo. El chavismo todavía no ha podido acomodarse a la realidad política derivada de su derrota en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre. Maduro las ha calificado ayer de "un golpe en falso". En medio de los rigores de la crisis económica, el presidente está convencido de que "el pueblo se está recuperando de ese golpe y está listo para una victoria" que volverá a restablecer el equilibrio.

El Congreso piensa que no hay regreso a la Venezuela anterior al 6 de diciembre.El gobernador de Miranda y uno de los principales referentes de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles, llamó a definir qué tipo mecanismo constitucional es el más viable para dar por concluida la era chavista. "Hay mucha gente que votaba por el oficialismo que dice que esto no va cambiar hasta que no cambie el Gobierno. Ante eso, no podemos esperar sentados. Llegaron los tiempos de activarnos".

Causa R, una de las agrupaciones que integran la MUD, acaba de presentar ante la AN una propuesta para modificar cuatro artículos de la Carta Magna. Con esas enmiendas se podría reducir el período de Maduro a cuatro años, los que se cumplen en 2017. Ramos Allup avalaría la iniciativa."Te quedarás con tu mala intención", pareció responderle el presidente.

LEY DE AMNISTÍA

En este contexto, la MUD y el chavismo se sacaron ayer chispas en el Congreso, donde fue presentado el proyecto opositor de Ley de Amnistía. "Hoy los venezolanos de bien anhelamos justicia, paz, reconciliación y amnistía para nuestros presos, perseguidos y exiliados políticos, pero también para la innumerable cantidad de empleados públicos que se sienten víctimas de persecución y acoso laboral; sepan que están incluidos en la Ley de Amnistía y que son parte fundamental de la reconciliación nacional que hoy clama nuestra Venezuela", dijo la diputada Delsa Solórzano.

Ilenia Medina, del bloque chavista, respondió airada:"le exigimos a la bancada de la derecha que no cometa el crimen que pretenden cometer. Hacer esto sería lesionar la Constitución, disolver el Estado social de derecho y de justicia. No lo podemos permitir porque de ahora en adelante se impondría la institucionalización de la impunidad", afirmó.

LA EMERGENCIA ECONÓMICA

"Al pueblo no le va a faltar su trabajo, ni su remuneración, ni su pensión. Yo para pagar este año sueldos y salarios y pensiones estoy haciendo de tripas corazón", dijo Maduro durante el acto y volvió a acusar a la AN de haberle dado la "espalda al pueblo" al rechazar su decreto de emergencia económica. Maduro centró sus ataques en el magnate Lorenzo Mendoza, dueño de las empresas Polar. "No permitamos que siga saboteando la economía del país".

Mendoza presentó una suerte de programa económico para reactivar la economía de un país que, según la Federación Nacional de Trabajadores de la Industria de la Harina (Fetraharina), tiene insumos hasta fines de marzo. Mendoza, un empresario cercano a la MUD, dijo que su plan se asienta en siete puntos insoslayables: el acceso a materias primas y el financiamiento internacional, el apuntalamiento de la producción nacional, un ajuste de precios, la reactivación de las empresas estatales y el campo. Todo esto debe hacer atendiendo el impacto que provocarán los cambios en los sectores sociales más vulnerables. Maduro desechó la propuesta y llamó a la unidad detrás del Gobierno para "afrontar esta tormenta".