ESPIRAL DE VIOLENCIA

Las milicias prorrusas humillan a Kiev

Los rebeldes se apoderan de vehículos blindados ucranianos

LEV GANIN
MOSCÚ

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Las autoridades de Ucrania se encontraron ayer con graves problemas para seguir adelante con la operación especial en el este del país contra los milicianos prorrusos que controlan sedes gubernamentales en una decena de ciudades de áreas de mayoría rusoparlante que exigen referendos para la federalización del Estado o la independencia.

Las fuerzas de la autodefensa popular de la ciudad de Slaviansk, en la región oriental de Donetsk, se apoderaron de varios vehículos blindados del Ejército ucraniano que Kiev había enviado para restablecer el control sobre las regiones rebeldes colindantes con Rusia. Según informó RIA Novosti, un grupo de residentes locales, entre ellos mujeres con niños, cercaron a tres blindados con soldados en las afueras de Slaviansk cuando se disponían a entrar en esa ciudad de unos 200.000 habitantes. Tras una breve conversación, los militares se rindieron y entregaron sus vehículos a los milicianos.

«Hemos decidido no luchar contra el pueblo», explicó un soldado. Agregó que él y sus compañeros que llegaron desde la vecina región de Dniepropetrovsk llevaban sin comer desde el domingo pasado cuando el presidente interino del país, Alexander Turchínov, anunció el inicio de la operación contra «los separatistas».

Activistas prorrusos informaron de numerosas deserciones de los militares ucranianos. Los soldados desesperados se quitaban el uniforme cambiándolo por vestidos de paisano a la población local. Luego se dirigían a casa.

Varias horas antes, los milicianos se apoderaron de seis blindados en la estación ferroviaria de Kramatorsk, ciudad situada cerca de Slaviansk. Semejante panorama hizo que el Parlamento de Kiev enviara al lugar de los hechos al ministro de Defensa para que coordinara el avance de las tropas.

Mientras, el Parlamento de Transdniéster aprobó ayer un llamamiento a la ONU y Rusia para que reconozca la independencia de esta república situada en el territorio de Moldavia, donde rusos y ucranianos forman un 60% de la población.