Kirchner defiende su derecho a opinar sobre el 'caso Nisman'

“Acá estoy, un poco averiada, como [el juego de] la batalla naval, pero jamás hundida", ha dicho la presidenta argentina Cristina Kirchner en su primer acto político desde que fue encontrado muerto Alberto Nisman, el fiscal que la había acusado de diseñar un plan de impunidad para los iranís sospechados de haber participado del atentado terrorista contra la mutual judía que el 18 de julio de 1994 provocó 85 muertos. Nisman, cuya denuncia demostró ser inconsistente, ha sido enterrado este jueves, pero la polémica sobre las causas de su deceso --suicidio o asesinato-- no se han disipado. Tampoco los costes políticos que ha pagado el Gobierno por este episodio de alta conmoción.

"Esta presidenta va a estar al frente del barco como siempre lo ha hecho, pese a que algunos lo quieran hundir", dijo Fernández de Kirchner, dejando entrever que el deceso del fiscal fue utilizado con fines conspirativos. "En silla de ruedas, con una pata al hombro, como sea, esta presidenta va a estar al frente del barco como siempre lo ha hecho", señaló sobre la convalecencia derivada de su fractura del tobillo izquierdo, aunque su auditorio entendió la alusión como una muestra de firmeza política frente a la crisis.

ANÁLISIS Y PRUEBAS

Durante un acto en el que se anunció un aumento del 18% de las jubilaciones, Fernández de Kirchner defendió su derecho a opinar sobre la causa judicial que concentra todas las miradas dentro y fuera del país. La fiscal Viviana Fein esperaba en las próximas horas un análisis de lo que registraron las cámaras de seguridad del edificio donde vivía Nisman. También aguardaba las pruebas toxicológicas del arma que le provocó la muerte.

"Si desde el presidente de la Corte hasta el último de los jueces y fiscales pueden hablar [sobre la evolución de la causa], ¿cómo no voy a poder hacerlo yo, que soy la presidenta? Por favor. Lean la Constitución. El más importante es el artículo 16, el que dice que todos los habitantes son iguales, cualquiera sea el cargo que ostente", dijo Fernández de Kirchner en respuesta al vicepresidente de la Asociación de Magistrados, Ricardo Sáenz, quien consideró que "no es conveniente” que la mandataria opine.

OPINIONES EN FACEBOOK

"Nadie desde otro poder le puede decir a la presidenta que se calle la boca y no hable", dijo Fernández de Kirchner, que antes de su mensaje televisivo del último lunes había escrito dos extensas cartas en su página de Facebook en las que hizo extensas referencias a lo que había ocurrido con la muerte de Nisman. "Es predemocrático intentar silenciar voces", opinó CFK, y sostuvo que no le interesa "una democracia silenciosa ni silenciada".

Por último, la presidenta sugirió que el 'caso Nisman' no es ajeno a la trama política que se desarrolla en Oriente Próximo y a las contradicciones que surgieron entre Israel y Estados Unidos por la decisión de Washington de buscar un canal de diálogo con Teherán. “No permitamos que nos traigan conflictos de afuera, que no son nuestros, a la República Argentina. No permitamos que nos dividan, vayamos a las próximas elecciones en paz con tranquilidad, con alegría", dijo, sobre la contienda del próximo octubre.