LAS ACTUACIONES POLICIALES EN EEUU

Polémica por la muerte de otro negro desarmado en Baltimore

IDOYA NOAIN / NUEVA YORK

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

En el último año y medio, tras una grave sucesión de muertes de negros desarmados a manos de la policía, Estados Unidos se ha sumergido en importantes debates. Se analizan y buscan causas a problemas de racismo y de marginación socioeconómica racial, se discute sobre el uso excesivo de fuerza de las autoridades y se ha tomado conciencia de la trascendencia de contar con pruebas, incluyendo grabaciones de vídeo, que eviten que exista una única versión de lo ocurrido. Todo vuelve a cobrar actualidad en Baltimore.

La ciudad de Maryland, que estalló en revueltas después de que en abril falleciera en custodia policial Freddie Gray, vuelve a estar en el ojo del huracán por la muerte el miércoles de Keith McLeod, un joven de 19 años. Sospechoso de intentar comprar con una receta falsa un jarabe (que en EEUU muchos usan solo o con alcohol para colocarse), el policía del condado David Earomirski lo localizó en el aparcamiento de la farmacia. Tras una persecución se acercó a McLeod con su arma reglamentaria desenfundada y apuntándole. McLeod entonces se llevó los brazos a la cintura, tras la espalda, e hizo amago de coger algo. No tenía, no obstante, arma, y apuntó con los dedos al policía. Este inmediatamente disparó y McLeod cayó al suelo. Acabó recibiendo tres impactos de bala, que le costaron la vida.

Un día después la policía del condado de Baltimore ratificó su versión de los hechos y dijo que había testigos que aseguraban que McLeod gritó «te voy a matar» al agente (un hombre blanco de 31 años con 10 de experiencia y que fue puesto en baja administrativa con sueldo). La policía informó también de que disponía de un vídeo grabado por la cámara de un comercio del área e inmediatamente Tony Fugett, presidente del grupo local de la Asociación Nacional para el Avance de Gente de Color y otros activistas reclamaron que se hiciera público.

«No me quiero creer a pies juntillas la versión policial y si reivindica al agente imagino que lo querrían hacer público», dijo en declaraciones recogidas por el 'Baltimore Sun' Fugett, que recordó también que la policía del condado de Baltimore ha dicho en el pasado creer que un sospechoso estaba armado para acabar comprobando que no era así (en uno de los otros tres últimos casos de muertos a manos de la policía el sospechoso estaba desarmado).

LUCES Y SOMBRAS

La policía demostró creer que las imágenes ratificaban la versión del agente y el viernes hizo público el video. Este muestra claramente el gesto de inicial de McLeod pero no tiene sonido y tampoco aclara si dos de los tiros se produjeron cuando el joven estaba ya en el suelo tras recibir el primer impacto de bala.

Aun así, James Johnson, jefe de la policía del condado de Baltimore (que este mes anunció una inversión de siete millones de dólares para empezar a dotar a sus agentes con cámaras a partir del verano que viene), defendió al oficial. «Cualquier policía o ciudadano razonable que se encontrara en esta situación sentía que enfrentan daño o muerte inminente -dijo en comparecencia ante la prensa-. Mi agente tuvo un segundo para tomar una decisión de vida o muerte». Fugett no respondió a un mensaje de EL PERIÓDICO este sábado pidiéndole su reacción al vídeo.