Irak completa su Gobierno de unidad contra los yihadistas

El Gobierno de Irak ha quedado completado este sábado con la elección de los titulares de las carteras aún vacantes, entre ellas Defensa e Interior, tras más de un mes de bloqueo político. Pese a que la sustitución del polémico primer ministro Nuri al Maliki por el también chií Haidar al Abadi el pasado agosto abrió camino a solucionar la importante crisis política que vivía Irak, las cuentas pendientes entre los diversos partidos y facciones etno-religiosas en que está dividido el muy fragmentado Parlamento iraquí había impedido constituir el nuevo Gobierno.

Finalmente, el hemiciclo ha dado el visto bueno a la elección del suní Jaled al Obeidi para la cartera de Defensa y del chií Mohamed al Gaban para la de Interior y, además, los seis ministros kurdos aceptaron jurar sus cargos tras varias semanas en que habían presentado objeciones al programa de gobierno. De este modo, el Ejecutivo podrá comenzar a actuar ante los «verdaderos desafíos», en palabras de Al Abadi, que presenta la ofensiva del Estado Islámico (EI) en varias partes del país, donde controla regiones enteras y desde donde avanza peligrosamente hacia la capital, Bagdad.

Desde el viernes, se lleva a cabo una ofensiva del Ejército iraquí para intentar recuperar importantes ciudades como Tikrit, cuna del exdictador Sadam Husein, en una operación con apoyo aéreo de la coalición que dirige EEUU y que ayer causó la muerte de al menos 25 combatientes. También ayer la aviación iraquí bombardeó posiciones del EI en la localidad norteña de Tel Afar, matando a 16 yihadistas.

DETENCIONES

En Mosul, bastión de este grupo islamista en Irak, el EI ordenó la detención de 120 personas, muchas de ellas exoficiales de la Policía iraquí, acusándoles del asesinato de un cabecilla del grupo. En los alrededores de Mosul los extremistas han establecido numerosos controles e impiden a los habitantes salir de la ciudad sin un permiso especial de las autoridades del califato bajo pena de fuertes castigos.

Los yihadistas dieron muestra nuevamente de su determinación y crueldad al hacer pública la foto de un joven crucificado en Al Bab (Siria). Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, el EI le acusó de estar «espiando» y fotografiando sus bases en el lugar y ha ordenado que el cadáver crucificado sea expuesto tres días a modo de escarmiento.