POR NEGARSE A CONDENAR EL ATENTADO CONTRA 'CHARLIE HEBDO'

Interrogatorio polémico

Un niño de 8 años de confesión musulmana es interrogado por apología del terrorismo tras la denuncia del colegio -- El Observatorio contra la Islamofobia habla de «histeria colectiva»

EVA CANTÓN / PARÍS

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El interrogatorio policial al que fue sometido un niño de ocho años por negarse a condenar el atentado yihadista contra el semanario Charlie Hebdo ha generado una agria polémica en Francia. El conflicto se desató el pasado 8 de enero, un día después de la matanza en la sede de la revista en la que murieron 12 personas, entre ellas sus dibujantes más emblemáticos. Ahmed, un chaval de primaria de confesión musulmana, le dijo a su profesor que no se sentía identificado con el lema Yo soy Charlie que se extendió rápidamente en la sociedad francesa como muestra de solidaridad con las víctimas del atentado.

Ahmed fue más lejos al afirmar que él estaba con los terroristas porque Charlie Hebdo había hecho caricaturas del profeta Mahoma. Sin llegar a apoyar el terrorismo, muchos musulmanes en Francia no ocultan su desagrado con la sátira de la revista, al sentirse heridos por la ridiculización de Mahoma y entender que se trata de una blasfemia, por más que ese delito no figure en el Código Penal.

Pues bien, el maestro en cuestión puso los hechos en conocimiento del director del colegio, un centro de primaria de Niza. A continuación, se comunicó el incidente a la célula de protección de la infancia y se le pidieron explicaciones al padre del chico que, al parecer, mantuvo un intercambio verbal subido de todo con el equipo directivo, al que habría llegado a amenazar, según las informaciones difundidas por la prensa local.

Definición de terrorista /

La actitud del padre del alumno fue lo que llevó al director a denunciar los hechos a la policía que, a su vez, citó a declarar al padre y al niño. En el transcurso del interrogatorio, el chico admitió haber pronunciado las palabras que se le atribuían pero también dijo que no entendía muy bien lo que era un terrorista.

El revuelo adquirió una nueva dimensión cuando el Observatorio nacional contra la Islamofobia manifestó su preocupación por la noticia y criticó que «la lucha contra la radicalización no tiene por qué dar lugar a una histeria colectiva». En un intento de contemporizar, el director de seguridad pública del Departamento, Marcel Authier, matizó que se había citado en comisaría al niño y a su padre «para intentar entender cómo un chico de ocho años había podido decir algo tan radical». 

Mientras, el abogado del padre, Sefen Guez-Guez, que tuiteó extractos del interrogatorio, denunció al director del colegio por, presuntamente, haber golpeado la cabeza del alumno contra la pizarra y gritarle.

Así las cosas, la ministra de Educación, Najat Vallaud-Belkacem, se vio ayer obligada a tomar cartas en el asunto. La ministra no sólo salió en defensa del centro educativo sino que le dio al equipo directivo las gracias por haber actuado como lo hicieron. «Lo digo con claridad. Este equipo no sólo ha hecho bien comportándose así, sino que su trabajo de seguimiento pedagógico y social es un trabajo útil y quiero agradecérselo», declaró. En la misma línea, el alcalde de Niza, Christian Estrosi, de la conservadora UMP, arropó al director de la escuela y confió en que la justicia actúe con firmeza frente a la responsabilidad del padre.

También Twitter fue un hervidero. El hashtag #Ahmed8ans (Ahmed 8 años)  fue usado casi 4. 000 veces a lo largo de la mañana de ayer. Los internautas entraron en el debate con comentarios irónicos, de preocupación, rabia e incluso humor. Otros se alineaban con la decisión del colegio de poner el asunto en manos de la justicia.