Un incendio sin control en un gran almacén de gas amenaza Trípoli

Definitivamente, Libia se hunde en el caos. Prueba de ello es que los combates entre milicias armadas han provocado un incendio en un gigantesco almacén de combustible cercano a Trípoli que, en caso de explotar, puede arrasar varios barrios de la capital, tal y como advirtió Mohamed al Hariri, portavoz de la Compañía Nacional del Petróleo.

Ayer, al cierre de esta edición, los bomberos no solo no habían conseguido extinguir las llamas, si no que estas se habían extendido a otro almacén. El temor es que se genere una explosión en cadena de los distintos depósitos de combustible que están en el complejo. «Puede provocar una catástrofe. Existe el riesgo de una gran explosión que causará daños en un radio de entre tres y cinco kilómetros», añadió Hariri. Por eso, se ha ordenado la evacuación de los residentes en los barrios cercanos.

El incendio comenzó cuando el complejo de almacenaje de combustible recibió el impacto de un cohete lanzado por una de las milicias que desde el pasado 13 de julio combaten por el control del aeropuerto de Trípoli. Esos choques enfrentan a milicias originarias de Zintan, que controlaban el aeropuerto, contra grupos de hombres armados islamistas originarios de Misrata, y que pretendían arrebatarles el aeródromo. En total, esos enfrentamientos han causado ya un centenar de víctimas y más de 400 heridos.

EMBAJADA AL MÍNIMO / Esos choques y la situación de violencia en general han llevado a países como Estados Unidos, Gran Bretaña e Italia a evacuar a todo su personal diplomático. Ayer, el Ministerio de Defensa español anunció el envío de un avión a Libia para realizar la evacuación de buena parte del personal de la embajada y de todos los ciudadanos españoles que están residiendo en el país norteafricano.

Actualmente, en Libia viven unos 150 españoles. El ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, explicó ayer que la embajada no va a cerrarse del todo como muestra del apoyo español al nuevo Parlamento libio, que ha de constituirse el 4 de agosto tras un polémico recuento de los votos de las legislativas.