Efectos del 'Nueragate'

La imagen de Michelle Bachelet se sigue desplomando por el escándalo de tráfico de influencias

La aprobación de la presidenta es de apenas el 31% y en el Gobierno se encendieron las luces de alarma

ABEL GILBERT / BUENOS AIRES

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

“En el nombre del hijo”, dicen en Pascuas muchos chilenos, y no se trata de una glosa de la oración católica, a tono con los días que corren. El caso de tráfico de influencias que involucra a Sebastián Dávalos y la nuera de Michelle Bachelet, Natalia Compagnon, se ha convertido en el azote del Gobierno de la coalición de centroizquierda Nueva Mayoría. La imagen de la presidenta se ha desplomado ocho puntos desde febrero y quedó en el 31%. El “Nueragate”, como llama la prensa al episodio por el cual Campagnon accedió a un crédito bancario de 10,4 millones de dólares, facilitado por su condición de esposa de Dávalos, entonces con un cargo en el Palacio de la Moneda, ha provocado un notable cambio de sensibilidad de los chilenos. La encuesta de Adimark, que se considera como una suerte de verdad revelada, encuentra sin respuestas contundentes a las principales figuras de la coalición. Hasta el momento, Bachelet se abstuvo de condenar explícitamente al también llamado “caso Caval”, aunque prometió “hacerse cargo” de elevar estándares éticos y legales “afecte a quien afecte”. Sin embargo, ese compromiso no ha frenado el deterioro de su imagen.

DESCONTENTO INÉDITO

Nunca antes Bachelet enfrentó tanto descontento. Ni siquiera en su primer mandato, cuando alcanzó un piso de 35% en medio de las manifestaciones y tomas de colegios secundarios que dieron nacimiento a la “revolución pingüina”, el germen de lo que serían, cinco años después, las protestas estudiantiles que remecieron al presidente conservador Sebastián Piñera. Ahora, cerca de Bachelet temen que a la mandataria le suceda lo mismo que a su antecesor, quien llegó a tener el apoyo más bajo alcanzado por un jefe de Estado en Chile desde que se recuperó la democracia, en 1990: un 26%.

La encuesta de Adimark encendió todas las alarmas: un 59% de los chilenos desconfían hoy de Bachelet. Solo el manejo de las relaciones internacionales es ponderado por los consultados. El combate contra la corrupción es desaprobado por un 81%.

El tema de la corrupción se ha convertido en altamente sensible en Chile desde que comenzó 2015. Los dueños del Grupo Penta, valuado en los 10 mil millones de dólares, cumplen prisión preventiva en la Cárcel de Alta Seguridad (CAS) de Santiago de Chile en el marco de una causa de evasión de impuestos y financiamiento irregular de la política que salpica a su vez a la derecha más pinochetista, la Unión Democrática Independiente (UDI).  Se trata del escándalo más resonante desde que el dictador Augusto Pinochet abandonó el poder. A la par, estalló el “Nueragate” y, según Adimark afectó a una figura “que hasta ahora parecía incombustible”, la de Baschelet.

PARALISIS

“El amargo 31% de respaldo que obtuvo la Mandataria durante marzo es efecto directo del impacto que generó el caso Caval en la opinión pública, pero también de las consecuencias que gatilló al interior del propio palacio, un evidente vacío de poder, por la inmovilidad en que se sumió Bachelet tras dicha polémica y la criticada debilidad que reflejó el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, para contener y canalizar la crisis”, dijo el portal “El Mostrador”. El Gobierno de Nueva Mayoría se encuentra en una verdadera encrucijada, coinciden otros analistas.

La presidenta está paralizada”, dijo el ex candidato presidencial de centro izquierda Marco Enríquez-Ominami. De acuerdo con el dirigente, que se encuentra en la oposición, el Gobierno abrazó cuatro reformas que tenían un cuarto de siglo de deuda y las impulsó de manera serena y prudente: la tributaria, educativa, el fin del sistema electoral de la dictadura y la unión civil. Pero después de ese “impulso transformador” llegó el “Nueragate” y se está perdiendo “un tiempo valioso” para avanzar por el sendero virtuoso.