Madre muerta, madre viva

Un hospital británico informa, por error, de la muerte de una paciente cuando estaba viva

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Un hospital británico comunicó, por error, la muerte de una anciana de 94 años a su familia a pesar de que aun estaba viva. La NHS Fundation se disculpó después de mostrar un cuerpo sin vida a la familia que no correspondía al de su allegada.

Liz Page, de 61 años, ha denunciado que en el hospital le informaron de que su madre, Phyllis Lilley, de 94, había muerto después de sufrir un ataque. Cuando estaba haciendo los preparativos para el funeral, recibió la llamada del centro hospitalario informando del error. De hecho, su progenitora continúa viva a día de hoy.

Tras una exhaustiva investigación sobre lo sucedido, Liz Page recibió las excusas del centro hospitalario, que cambió los protocolos de actuación para evitar repetir hechos de similares características.