El Gobierno francés impide la subida de los peajes

Más de la mitad de los diputados socialistas eclaman la anulación de las concesiones con vistas a una eventual re-nacionalización

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El Gobierno francés ha justificado este miércoles la paralización de la subida de los peajes de las autopistas, que debía producirse el próximo 1 de febrero, para forzar a las sociedades concesionarias a negociar unas nuevas condiciones de explotación, y bajo la amenaza de romper los contratos actuales.

La titular de Ecología, Ségolène Royal, ha señalado a la salida del Consejo de Ministros que el objetivo de la congelación de los peajes es conseguir "un diálogo constructivo que permita reglas claras".

"Es una congelación que permite replantear todos los elementos", precisó Royal en declaraciones a la prensa, que subrayó que "el Gobierno protege los intereses de los usuarios" y que se pueden lograr "soluciones equilibradas" para "no hacer pesar todo sobre el automovilista, que paga muy caras las autopistas".

En la misma línea, el ministro de Finanzas, Michel Sapin, ha señalado en una entrevista a la emisora "RTL" que "todo el mundo considera -las autoridades de la competencia- que hay una situación anormal, y que los precios son más elevados de lo que deberían".

Sapin ha puntualizado que el incremento de tarifas del 1 de febrero, que iba a ser del 0,57 %, se ha suspendido para aclarar "lo que es normal en el aumento y lo que es anormal", porque en los últimos años la evolución "ha sido anormal" si se compara con la inflación.

El Ejecutivo discute con las concesionarias de autopistas (entre las que destacan los grupos franceses Vinci o Eiffage, pero también el español Abertis) desde finales de 2014 con "dos escenarios", según un comunicado del gabinete del primer ministro, Manuel Valls.

Esas dos alternativas son una "renegociación de los contratos de concesión" o la denuncia de esos contratos.

Las negociaciones se llevan a cabo en medio de una polémica política, 152 diputados socialistas (más de la mitad de los del grupo) reclaman la anulación de las concesiones con vistas a una eventual re-nacionalización.

Uno de sus argumentos es que los ingresos de las autopistas crecieron un 26 %: 6.486 millones de euros en el momento de la privatización en 2013 frente a los 8.202 millones de 2013.

La Asociación de Sociedades Francesas de Autopistas (Asfa) ha decidido recurrir la suspensión del alza de sus peajes ante los tribunales.