Francia recorta en sanidad, ayudas familiares y pensiones

El Gobierno francés ha confirmado este miércoles su intención de ponerle freno al gasto público para encarrillar el déficit. Sin embargo, el tijeretazo de 21.000 millones de euros que contemplan los presupuestos para el año 2015 no le garantiza a París el cumplimiento de sus obligaciones frente a Bruselas. En todo caso, las cuentas públicas presentadas ayer por el ministro de Finanzas, Michel Sapin, contemplan un buen recorte en prestaciones sociales: 9.600 millones, de los cuales 3.200 serán en Sanidad, sobre todo a través de un mayor control de los precios y de la prescripción de medicamentos. Las ayudas directas a las familias se reducirán en unos 700 millones y las pensiones sufrirán un tijeretazo de 500. Los funcionarios públicos también tendrán que apretarse el cinturón porque el Estado tendrá 7.700 millones de euros menos de presupuesto y los entes locales verán sus cuentas mermadas en 3.700 millones.

En esencia, el proyecto que tendrá que debatirse en la Asamblea Nacional a mediados de octubre refleja la filosofía del polémico Pacto de Responsabilidad con el que el Ejecutivo de Manuel Valls pretende impulsar el crecimiento rebajando las cargas fiscales a las empresas a cambio de promover la contratación. El plan es reducir el gasto público en 50.000 millones de euros en tres años, es decir, de aquí al 2017. Para elaborar sus cuentas, el Gobierno confía en un repunte paulatino tanto del crecimiento como de la inflación. Hasta ahora la economía francesa permanece estancada trimestre tras trimestre y para el 2014 se prevé un PIB del 0,4% que llegaría al 1% en el 2015.

La educación, prioridad

Dentro del recorte generalizado que sufrirán todos los ministerios, la prioridad sigue siendo una vez más, la Educación, que se llevará el 90% de las nuevas plazas de funcionarios que se convoquen. El Departamento que sale peor parado es el de Defensa, que se verá privado de 7.500 puestos, el 58% del total. En cuanto a los recursos presupuestarios, la Enseñanza Primaria contará con 47.400 millones, 1.100 más de lo que se esperaba. Y la Universidad y la investigación se mantienen estables con 25.700 millones. Lo mismo ocurre con la Cultura y la Comunicación, que seguirán teniendo unos 7.000 millones de euros tras dos años de recortes. «Es el Estado el que hace el mayor esfuerzo», decía Michel Sapin en una entrevista en Le Monde. Para mantener las promesas de Valls, y también para no soliviantar más a los elementos más críticos del socialismo francés, el marco presupuestario no contempla subida de impuestos. Al contrario, el próximo año los franceses que no lleguen a los 12.000 euros anuales no pagarán el impuesto sobre la renta.