Farage anuncia su dimisión y se desentiende de la negociación con la UE

Nuevo vuelco en la política británica. El eurófobo Nigel Farage, líder del Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), ha anunciado este lunes su dimisión con una sonrisa y gesto relajado, al sentir que ha cumplido su misión. “Mi objetivo de estar en política era sacar a Reino Unido de la Unión Europea. Siento que he hecho mi parte y que no hay nada más que pueda lograr”, ha declarado durante una rueda de prensa.

Diez días después del triunfo del "brexit" en el referéndum del pasado 23 de junio en el que más de 17 millones de votantes apoyaron la salida de Reino Unido de la Unión Europea, Farage pone punto y final a su carrera política dentro del partido, siendo la tercera vez que dimite como líder del UKIP.

Su marcha se une a la oleada de anuncios políticos que han sobresaltado a los británicos en las últimas dos semanas. Pero en este caso él, a diferencia de otros, se marcha con la sensación de haber hecho los deberes, obviando que queda por hacer la peor parte. la negociación con la UE para salir. "Durante la campaña para el referéndum, había dicho que quería recuperar mi país. Lo que estoy diciendo hoy es que quiero recuperar mi vida”, ha afirmado, orgulloso.

PENDIENTE DE LAS NEGOCIACIONES

El líder antiinmigración ha afirmado que seguirá ayudando a su formación y también al "movimiento de la independencia" en la UE y ha avisado de que seguirá “las negociaciones con Bruselas como un halcón”.

“Hemos ganado pero no estoy tan seguro de qué acuerdo alcanzaremos con la UE. Necesitamos un primer ministro que no nos venda", ha explicado. Por ello, advierte de que sus compañeros de partido estarán atentos por si tienen que intervenir si no se consigue el acuerdo deseado.

Durante su despedida ante la prensa, Farage ha afirmado que "no se habría celebrado un referéndum en este país si no hubiera sido por la labor del ejército del pueblo del UKIP”, y no le falta razón. Una de las principales razones por las que el primer ministro,.David Cameron, convocó la consulta fue para conseguir minimizar la fuga de votos de los 'tories' al UKIP, atraídos por su discurso antiinmigración y antieuropeo que pedía el ‘brexit’. En las elecciones al Parlamento Europeo del 2014,  el UKIP fue la fuerza política más votada.

Farage ha dicho adiós sin haber conseguido dar ningún discurso en el Parlamento británico, donde nunca consiguió un escaño como diputado en las siete elecciones a las que se presentó. Se marcha en cambio tras haber contribuido a la división un país que se encuentra sumido en una profunda división y en una de sus peores crisis políticas, económicas e institucionales tras el referéndum. 

La primera dimisión fue la de David Cameron, que al día siguiente de la consulta anunció que dejará el cargo después del verano, para que sean los políticos del 'brexit' los que lleven la negociación con la UE. El exalcade de Londres, Boris Johnson, tiró la toalla la semana pasada y ahora se ha desentendido también el líder del UKIP, el mismo que celebró la consulta como "el día de la independencia".

REDUCCIÓN DEL IMPUESTO DE SOCIEDADES

Ya ante la sensación de un vacío de poder, la incertidumbre se acentúa. En un intento de evitar la potencial marcha de empresas del Reino Unido', el ministro británico de Finanzas, George Osborne, ha expresado la disposición de su Gobierno a reducir por debajo del 15% el impuesto de sociedades, que actualmente es del 20%. De este modo, Reino Unido pasaría a contar con el menor gravamen empresarial entre las principales economías mundiales y se acercaría al tipo del 12,5% aplicado en la vecina Irlanda.

En declaraciones al 'Financial Times', diario de referencia en la 'City', el ministro de Finanzas de Reino Unido ha subrayado la necesidad de centrarse en el "horizonte y el trayecto", así como su voluntad de cobrar un papel destacado en el diseño de "una economía supercompetitiva" con bajos impuestos a las empresas bajos y un enfoque global.