Europol avisa de que el Estado Islámico puede recurrir a los secuestros

La agencia europea de policía revisa la amenaza yihadista y el modus operandi en el viejo continente

Momento de la detención de un yihadista en Madrid, este sábado.

Momento de la detención de un yihadista en Madrid, este sábado. / periodico

SILVIA MARTINEZ / BRUSELAS

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El Estado Islámico (Ei) podría exportar al viejo continente algunos de los métodos para sembrar el terror que ya utiliza en Siria o Irak. Concretamente, y según un informe publicado este viernes por la agencia europea de policía (Europol), este grupo terrorista podría recurrir a la extorsión, el secuestro e incluso poner coches bomba en territorio europeo, aunque el escenario más probable con el que trabajan las autoridades policiales europeas sigue siendo el de ataques como los cometidos en Bruselas y París.

“Tenemos que seguir estando vigilantes porque la amenaza que representa el llamado Estado Islámico y los combatientes extranjeros retornados es muy probable que persista en los próximos años”, ha alertado el coordinador de la lucha antiterrorista europea, Gilles de Kerchove. El nuevo análisis relizado por Europol reitera una advertencia que recorre Europa desde hace meses: que es muy probable que Europa, y especialmente los países que forman parte de la coalición contra el Estado Islámico así como Francia y Bélgica, puedan ser objeto de ataques de grupos o lobos solitarios.

De hecho, algunos servicios de inteligencia cifran en “varias docenas” el número de personas directamente vinculadas con este grupo yihadista que estarían actualmente en Europa y que tendrían capacidad de cometer atentados que, según Europol, llevan planificándose desde el año 2013. “Asumiendo que el Estado Islámico sigue teniendo la voluntad y la capacidad de atacar de nuevo es probable que en un futuro próximo se produzcan nuevos ataques en la UE, tanto por parte de actores solitarios como de grupos”, avisan.

Objetivos "blandos"

Pese al posible uso de nuevos métodos como coches bomba, el escenario más probable con el que trabajan siguen siendo los ataques al estilo de los vividos en 2015 y 2016 en Bruselas y París, debido a la facilidad para adquiririr el tipo de armas y explosivos utilizados entonces y el resultado obtenido. No obstante, no descartan ningún posible método. “Se cree que el grupo responsable de los ataques de París y Bruselas tenía planes de producir explosivos para ser ocultados en un coche y ser detonados, probablemente en algún lugar de Francia” aunque “las acciones de la policía los obligaron a modificar sus planes”, explican en el informe.

En cuanto a los posibles objetivos, las fuerzas de seguridad trabajan en la hipótesis de que “la aparente preferencia de objetivos blandos –aquellos diseñados para sembrar el pánico entre la población- significa que las infraestructuras críticas como plantas nucleares no serían actualmente una prioridad” para los terroristas del ISIS cuyo objetivo principal sería causar el mayor número de muertes posibles y obtener el mayor impacto económico posible.

Ataques desde Libia

El informe también confirma que las autoridades trabajan con la hipótesis de que el Estado Islámico pueda empezar a planificar y lanzar ataques desde Libia y que si siguen perdiendo territorio o se ven severamente debilitados en Siria o Irak pueda haber una aumento de combatientes y familias que retornen a Europa. “Aquellos que consigan entrar en la UE representarán un riesgo potencial para la seguridad de la Unión. Dado el alto número de personas involucradas, esto representa un desafío de seguridad significativo a largo plazo”, advierten subrayando el riesgo que siguen representando también otras organizaciones terroristas como Al-Qaeda o Al-Nusra.

El estudio también apunta a la diáspora de refugiados que huyen de Siria como un grupo “vulnerable” a la radicalización e insiste en que podría ser uno de los objetivos de los reclutadores del Estado Islámico para obligar a los Estados miembros a modificar sus políticas de acogida. “La amenaza es todavía alta” y “solo puede ser afrontada con una mejor colaboración”, avisa el director de Europol, Robin Wainwright, sobre las conclusiones del informe. El número de ataques yihadistas se ha disparado en los últimos años, pasando de 4 en 2014 a 17 en 2015 y el número de arrestados se ha duplicado (395 en 2014 a 667 en 2015).