TRIUNFO DE LAS TESIS ALEMANAS

El estancamiento del PIB precipita el cambio de Gobierno en Francia

La política de Hollande pretende recortar el déficit, reducir impuestos a las empresas y afrontar una reforma laboral

Manuel Valls sale del palacio del Elíseo, el pasado 26 de marzo, tras la reunión del Consejo de Ministros.

Manuel Valls sale del palacio del Elíseo, el pasado 26 de marzo, tras la reunión del Consejo de Ministros. / AJ/PSM

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El estancamiento del PIB francés ha acelerado el cambio de Gobierno. Francia está alarmada ante la situación económica. Mientras la popularidad del primer Gobierno del primer ministro, Manuel Valls, se ha desplomado, el presidente, François Hollande, pretende mayores recortes. Y el producto interior bruto (PIB) de Francia se estanca y el déficit superará el 4% en el 2014.

El crecimiento nulo se explica por un retroceso de las inversiones de las empresas (-0,8% respecto del primer trimestre) y la evolución del comercio exterior (-0,1%). La debacle podría producirse en el caso de la extensión del pesimismo entre la población, ya que todavía el consumo de los hogares y el gasto público crecen a un ritmo del 0,5%.

El objetivo de Hollande

El estancamiento de la actividad económica, unido a una baja inflación (-0,3% en julio respecto a junio) es un cócktel complicado para la economía francesa, adalid hasta ahora en Europa de las tesis de política económica más favorables a mantener el gasto público y las ayudas sociales para capear la crisis. Respetar en el 2015 el máximo europeo de un 3% de déficit público se había convertido en una entelequia que Hollande está dispuesto ahora a conseguir, aun a costa de cualquier Gobierno reacio a aplicar medidas neoliberales. Hollande aboga por mejorar el crecimiento y la competitividad por la vía de reducir las cotizaciones de las empresas y afrontar una reforma laboral que abarate los costes laborales.

La tesis alemana

Merkel parece la gran ganadora de la crisis política francesa. Mientras hasta ahora Francia defendía que buena parte de la responsabilidad del futuro económico de Europa pasaba por el Banco Central Europeo, el frente alemán aboga por que sean los estados miembros los responsables de reconducir la situación. España es un ejemplo de esa política de férrea lucha contar el déficit. 

Advertencias de Moody's

La agencia de calificación Moody's también redujo la semana pasada en una décima, al 0,5%, la previsión de crecimiento para la economía francesa este año. Moody's recortó también su perspectiva de incremento del producto interior bruto (PIB) francés para el 2015, del 1,3% al 0,9%, y advirtió a la zona euro de los efectos para su calificación del crédito de una nueva relajación de los compromisos de reducción del déficit público. El incumplimiento del déficit de Francia tendría una influencia negativa importante en el mercado de deuda europea.

Pese a que Manuel Valls aseguró la semana pasada que no habría un cambio de política económica pese a los datos del PIB, el cambio de Gobierno abre el camino a que las políticas económicas antidéficit ganen fuerza.