Eastwood vuelve a la carga contra Obama

IDOYA NOAIN / Nueva York

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Días después de desenfundar contraBarack Obamaen unaintervención en la convención republicana en Tampaque se convirtió en un fenómeno informativo,Clint Eastwoodha hablado sobre lo sucedido. Lo ha hecho en unaentrevistaconcedida el martes ypublicada este viernes por el 'Carmel Pine Cone', una publicación de la localidad californiana de la que fue alcalde, donde no solo explica los entresijos de aquellos 12 minutos que han sido posiblemente lo más comentado del cónclave conservador, sino que vuelve a atacar al mandatario demócrata.

"El presidente Obama es el mayor timo perpetrado nunca contra los ciudadanos estadounidenses", declara el director y actor, que insiste en que "(Mitt) Romney y (Paul) Ryan harían un trabajo mucho mejor dirigiendo el país y eso es lo que la gente necesita saber".

Respecto a suintervención, que estaba previsto que durara cinco minutos pero se prolongó 12 y se convirtió inmediatamente en un fenómeno en lasredes sociales,Eastwoodha dicho: "Quizá he irritado a muchos izquierdosos, pero mi objetivo era la gente de centro".

Hablando a un Obama invisible

Eastwood sacó una silla vacía en la que hizo como si estuviera sentado un invisible Obama, y mantuvo con él unaconversación surrealistay llena deataques, algunos de tono soez. Criticó, entre otras cosas, el anuncio de cerrarGuantánamoy que el presidente haya puesto una fecha deretirada de Afganistán.

Larepercusiónde esa intervención, tremendamenteaplaudidapor los10.000 republicanoscongregados el jueves pasado en elTampa Bay Times Forumperocriticadasobre todo enmedios de comunicacióny círculos progresistas, restó el viernes pasado atención al discurso que la noche anterior pronunciaba tambiénMitt Romney. Puso también de manifiesto que a la campaña del candidato republicano, pese al estricto control que demostró en casi toda la convención, también se le escapan cosas de las manos.

En la entrevista con la publicación de Carmel, Eastwood dice que la campaña "no pudo dar el visto bueno", aprobar o censurar su discurso, porque él mismo "no sabía qué iba a decir". "Quería decir tres cosas: que no todo el mundo enHollywoodestá a la izquierda, queObamaha roto muchas de suspromesasy que la gente debería sentirse libre de deshacerse de cualquier político que no hace un buen trabajo, pero no decidí del todo qué iba a decir hasta que lo dije", explica.

La idea de la silla, según cuenta, se le ocurrió porque un hombre tras el escenario le preguntaba constantemente si quería sentarse, quizá por respeto a sus 82 años.