'Charlie Hebdo' vuelve a empezar

Los supervivientes de la masacre preparan el siguiente número con el apoyo de otros diarios

Encuentro 8 Reunión entre periodistas de 'Charlie Hebdo' y 'Libération', ayer, en la sede del segundo.

Encuentro 8 Reunión entre periodistas de 'Charlie Hebdo' y 'Libération', ayer, en la sede del segundo.

EVA CANTÓN / PARÍS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

En estado de conmoción aún, tan solo dos días después de que sus compañeros fueran masacrados, los periodistas supervivientes de Charlie Hebdo se instalaron ayer en la redacción del periódico Libération, que les ha cedido espacio para que puedan trabajar y sacar adelante el próximo número del semanario. Saldrá a las calles el miércoles, según el abogado de la publicación, Richard Malka, con una tirada de 1 millón de ejemplares. Habitualmente editan 60.000.

Un centenar de periodistas, algunos curiosos y numerosos policías desplegados para la ocasión esperaban el desembarco del semanario satírico en la sede del famoso diario de izquierdas, sito en la calle de Béranger, cerca de la plaza de la République. "El periódico de los supervivientes" es la expresión que se ha acuñado para designar el próximo número de ocho páginas de Charlie Hebdo, que los periodistas sacarán adelante en condiciones muy difíciles, casi heroicas, destrozados por la pérdida de sus compañeros. La solidaridad del conjunto de la prensa francesa con el semanario satírico quedó retratada, antes de la llegada de los periodistas, en la elocuente entrada en el edificio de una furgoneta en la que viajaba el material informático que el periódico Le Monde ha puesto a disposición de sus colegas: cinco ordenadores, una impresora y un escáner, entre otras cosas. La menguada redacción de Charlie Hebdo hizo su ingreso en las instalaciones del diario anfitrión por la puerta de atrás, sus desmoralizados integrantes jaleados por ciudadanos espontáneos y sus gritos de apoyo:

 «¡Valor, amigos! ¡No hay que desfallecer!»

Fuerza y corazón

«La emoción es grande, y la atmósfera, grave», describió luego la web de Libération el ambiente en el vestíbulo del edificio, donde los periodistas fueron recibidos por sus colegas. Los nuevos ordenadores fueron instalados en la sala donde habitualmente tienen lugar los consejos de redacción del diario. «Acogeremos con discreción y consideración al equipo diezmado que ha decidido continuar su misión a pesar de todo. Necesitan el apoyo de todos: aportamos nuestra pequeña contribución», escribió el director de Libération, Laurent Joffrin, para dar la bienvenida a sus compañeros. «Trabajarán en medio del dolor pero también con esperanza, para decir al país que la desgracia no basta para hacerlos desistir de su tarea». Más tarde, las agencias empezaron a enviar las imágenes de una primera reunión entre periodistas de las dos redacciones. Sin saber quién es quién, era fácil reconocer a los integrantes de uno y otro medio. Se veía el dolor en los rostros de aquellos que habitualmente se dedican a hacer reír.

También circuló la portada del próximo número, que muchos quizá guardarán por histórica, o en honor a los muertos. El titular, sobre un fondo negro y luctuoso, es este: Urgent. Recherche 6 dessinateurs (Urgente. Se buscan seis dibujantes).

Una vez instalados los huéspedes, el abogado Malka salió un momento a la calle para dirigirse a los periodistas: «Estamos emocionados por vuestra presencia y vuestro apoyo, pero tenemos que hacer un periódico en las condiciones que ya conocéis. Necesitamos una cierta intimidad. Lo que tenemos que deciros, lo diremos en esas ocho páginas. La fuerza y el corazón que nos quedan lo vamos a poner en esas ocho páginas. Lo más urgente es el siguiente número de Charlie Hebdo».