Cameron propone expulsar a los inmigrantes parados y reducir su acceso a los beneficios sociales

El Reino Unido expulsará a los inmigrantes de la Unión Europea que no encuentren trabajo en el plazo de seis meses. Todos los inmigrantes  que se instalen en el país deberán esperar al menos cuatro años para poder recibir algunas ayudas sociales, como la destinada a la vivienda. Estos  nuevos requerimientos va especialmente destinado a los inmigrantes procedentes del Este de Europa, quienes, como el resto de los europeos comunitarios, no podrán  cobrar beneficios sociales por los hijos que no vivan en el Reino Unido, tal y como sucedía hasta ahora.

El nuevo paquete de propuestas anunciado por el primer ministro David Cameron endurece nuevamente las condiciones para los inmigrantes de la EU, en un intento más por frenar su llegada, después de que las últimas cifras divulgadas ayer mostraran un ascenso considerable. Cameron sin embargo ha abandonado la idea de imponer cuotas o límites en el número de inmigrantes, algo que había barajado pero que chocaba con el principio fundamental de la libre circulación de ciudadanos en la UE. El primer ministro ha insistido en que estos cambios en inmigración, serán “un requisito indispensable”, en las futuras conversaciones sobre la reforma de la UE. “Tenemos el derecho a que se nos oiga y se nos va a oír”, ha declarado. De caer sus  propuestas en “oídos sordos”, ha advertido que no “descarta nada”, en cuando a la permanencia británica en la Unión.

El líder conservador se ha distanciado también de los propósitos y el  lenguaje del UKIP,  alertando a los ciudadanos de  no “demonizar” a los inmigrantes ni dejarse seducir por “soluciones simplistas” .