CRISIS HUMANITARIA EN EUROPA

Barcelona apoya a los refugiados ante la "inacción" del Gobierno y la UE

De izquierda a derecha, los alcaldes de Lampedusa, Barcelona y Lesbos, Giuseppina Nicolini, Ada Colau y Spyros Galinos.

De izquierda a derecha, los alcaldes de Lampedusa, Barcelona y Lesbos, Giuseppina Nicolini, Ada Colau y Spyros Galinos. / periodico

VÍCTOR VARGAS LLAMAS / BARCELONA

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La Europa de las ciudades pide paso a la Europa de los estados. Esa es la apuesta del Ayuntamiento de Barcelona para paliar la “vergonzante situación” de los refugiados “ante la ausencia de una respuesta ética, humana y práctica” con que Ada Colau ha acusado a la UE y, especialmente, al Gobierno del PP. Agotada la paciencia tras meses sin recibir la llegada de los miles de asilados que se preveían a estas alturas, el consistorio de la capital catalana ha plasmado su compromiso como ciudad refugio con un acuerdo con dos de los lugares más azotados por el desembarco masivo de inmigrantes que huyen del horror de la guerra: Lesbos (Grecia) y Lampedusa (Italia). La dirigente ha acusado a Bruselas y España de ser “cómplices de la muerte y el sufrimiento de miles de personas” y ha denunciado que el Estado “es el gran obstáculo“ para que los refugiados lleguen a Barcelona.

“Ya que no nos dejan ayudar directamente, trataremos de ayudar a los que sí ayudan sobre el terreno”, ha expresado Colau tras la firma de un acuerdo de cooperación con sus homónimos en ambas islas. Solo 18 refugiados han llegado oficialmente a España, si bien el Servicio de Atención a Inmigrantes Extranjeros y Refugiados de Barcelona triplicó el año pasado los usuarios del 2013, hasta los 1.371 casos.

Bajo el nombre ‘De ciudad a ciudad’, Barcelona busca una vía pragmática a “la opacidad y la falta de respuesta” del Ejecutivo de Rajoy ante las constantes interpelaciones sobre la manera de ayudar a los refugiados. Una iniciativa que, lastrada por la falta de competencias en materia de asilo, se debe limitar en primera instancia a aspectos de apoyo logístico, técnico, social y medioambiental a lugares que no estaban preparados para encajar el fuerte impacto de la llegada masiva de inmigrantes durante meses. El pacto se irá concretando en función de las necesidades que se vayan detectando, como la de la gestión de residuos que se están descontrolando en aguas de Lesbos, “con chalecos salvavidas, restos de embarcaciones y basura” en cantidades ingentes, como ha expuesto su alcalde, Spyros Galinos.

TORMENTA PERFECTA

El político griego ha descrito la situación de una tormenta perfecta durante el 2015, con la pasividad de la UE y el Gobierno de Atenas bloqueado por la galopante crisis financiera, incapaz de dar respuesta al más de medio millón de refugiados que pasaron por Lesbos tratando de llegar a la Europa septentrional. Como incapaz se sentía una isla de 90.000 habitantes que, no obstante, ha sabido dar respuesta con sus escasos medios. “Hay que acabar con la xenofobia y con la idea de que el problema son los refugiados; ellos son las víctimas y el problema son las bombas que caen en sus países y las mafias que se aprovechan de la situación”, ha denunciado.

Una situación que conoció antes Lampedusa, como ha recordado su alcaldesa, Giuseppina Nicolini, cuando en el 2011 la llegada masiva de inmigrantes les desbordaba ante el silencio de la UE y “la visión deshumanizada de los medios”. “Ya está bien de que apunten al Mediterráneo como la frontera y el origen del problema -ha dicho-, cuando siempre ha sido cuna y punto de encuentro de la cultura, como demuestra este acuerdo esperanzador”.